Se quieren a morir en la vida, pero en pista no les gusta hacer prisioneros ni perder a nada que se propongan. Marc Márquez y Alex Márquez están haciendo historia en el deporte con ese dominio que llevan en el Mundial de MotoGP, donde si nada se tuerce son candidatos a campeón y subcampeón mundial. Habrá un día en que un error de uno en un adelantamiento acabará con la carrera del otro. Lo que nadie se esperaba es que un trozo de plástico casi acabara con la carrera Sprint en Brno de Alex Márquez.
Ese gesto de Marc Márquez de quitar el primer plástico de la visera, donde se enganchan los insectos que impactan, cuando se estaba acercando a su posición como segundo en parrilla, ha hecho que se posara sobre la octava plaza de la parrilla, justo donde Alex Márquez tenía que colocarse. Alex lo ha visto, además están identificados con el número del piloto, lo ha apartado como ha podido, pero al arrancar la rueda delantera de Alex Márquez ha patinado de lado a lado y lo han ido superando una decena larga de pilotos.
Con una carrera Sprint donde solo puntúan los nueve primeros y con la mano izquierda aún lesionada, la opción de Alex Márquez se ha malogrado y no ha podido pasar de la 17ª plaza, remontando solo dos plazas respecto a la vuelta inicial.
«No sé si ha sido un tear off o no, justo había uno y tenía el 93. Lo he visto, lo he tirado al lado y he patinado y he sido el único. Creo que no ha sido el tear off porque lo he apartado yo. Y luego atrás me lo he tomado con calma, no tenía gran feeling, era complicado y hemos tirado la Sprint Race a la basura», ha explicado Alex a DAZN.