Borja Iglesias (32 años) pasó de una temporada extraña con Betis y Bayer Leverkusen, siendo campeón de la Bundesliga, pero sin ver portería en todo el curso, algo impropio de un delantero, a aprovechar su cesión al Celta de la mejor manera. El gallego fue pieza clave para que los celestes alcanzaran la Europa League con 11 tantos y 3 asistencias en 37 partidos.
Sigue perteneciendo al Betis con el que tiene contrato hasta 2026, pero los andaluces prefieren que salga vendido. El Celta le quiere de vuelta, tal y como reconoció Claudio Giráldez. “Sigue siendo mi prioridad número uno para el puesto de nueve, sin duda”. Pero por ahora no hay acuerdo y otros clubes están preguntando por el ‘panda’.
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Es el caso de Valencia y de Girona, que han preguntado por su situación. En Mestalla buscan a alguien que ayude a Hugo Duro en la tarea de marcar goles, mientras que los catalanes necesitan con urgencia un killer, dado que Stuani ha renovado, pero no dejar de ser un veterano que no puede jugar todo. La prioridad del ex del Espanyol es volver a Balaídos, pero tampoco le disgusta la idea de quedarse en el Betis. El hecho de que acabe contrato en un año hace que los equipos negocien a la baja, pero los béticos buscan sacar al menos unos dos millones por su traspaso.
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