LaLiga ha rescatado una idea y ha tanteado al Villarreal CF para hacerla realidad: trasladar un partido del campeonato a los Estados Unidos de América. El club groguet valora la propuesta, que todavía se encuentra en fase inicial, y en caso de llevarse a cabo reclamaría una contraprestación para sus aficionados, siempre y cuando en el partido elegido actuara como local.
Jugar un partido oficial en los Estados Unidos es un viejo anhelo de LaLiga. La organización presidida por Javier Tebas ya impulsó esta ambiciosa idea años atrás con el objetivo principal de expandir la marca e internacionalizar la competición, tal y como hacen, de modo inverso la NBA y la NFL en Europa.
En aquel primer intento, los deseos de Tebas y de la mayoría de los clubs chocaron con la oposición de Luis Rubiales, entonces presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Pero ahora, sin Rubiales en la federación, el paisaje ha cambiado y la idea se ha reactivado. El actual presidente, Rafael Louzán, ve con mejores ojos el plan.
Los elegidos
LaLiga valora al Villarreal como un equipo top en su competición, con el añadido de haber obtenido el billete para competir en la Champions League esta temporada. Por ello, el club que preside Fernando Roig es una opción preferencial para jugar en Estados Unidos. En un principio, la sede elegida sería Miami y el partido con más papeletas de disputarse sería el Villarreal-Barcelona de la última jornada de diciembre (los días 20 o 21). Cabe recordar que las relaciones entre el Real Madrid y el presidente de LaLiga no son las mejores, por lo que se descarta la participación del club blanco.
El Hard Rock Stadium de Miami, antes de un partido del Mundial de Clubs. / EFE / EPA / CRISTOBAL HERRERA-ULASHKEVICH
A su vez, el Villarreal también valora la propuesta de LaLiga, consciente de los beneficios que comportaría a diferentes niveles. El partido en Estados Unidos sería un escaparate mayúsculo para el Submarino: impacto económico, construcción de marca, visibilidad… Al mismo tiempo, jugar un partido menos del campeonato liguero en su campo supondría un perjuicio tanto a nivel deportivo como social. Por ello, el club reclamaría una contraprestación para sus aficionados, al quedarse sin uno de los partidos más atractivos del curso en el Estadio de la Cerámica.
Estados Unidos, de hecho, no es territorio desconocido para el Villarreal, que colabora con ocho academias estadounidenses de fútbol base y organiza diferentes campus, uno de ellos precisamente en Miami. Allá podría viajar el Submarino, si la idea avanza por los cauces adecuados, para participar en una cita histórica para el fútbol español.
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