La Selección Española Femenina de Fútbol se ha impuesto a Suiza (2-0) en el partido de los cuartos de final de la Eurocopa 2025 con más sufrimiento del esperado.
Las de Montse Tomé se atascaron ante el muro defensivo planteado por las anfitrionas, pero en el tramo final dos detalles de calidad rompieron la igualdad. Athenea abrió la lata tras un taconazo de Aitana y Claudia Pina amplió la ventaja con un golazo por la escuadra. Mariona y Alexia fallaron dos penaltis.
Con su pase a semifinales, donde esperan Alemania o Francia las vigentes campeonas del mundo rompen otra barrera histórica, ya que nunca antes habían logrado pasar una ronda eliminatoria en Eurocopas.
España fue dueña de la posesión durante toda la primera parte, llegando a rozar el 80%, pero ese dominio no acabó de traducirse en ocasiones claras.
El muro defensivo de las suizas estuvo siempre bien plantado y la superioridad técnica de las españolas solo se plasmó en acciones aisladas.
El partido pudo haber sido muy distinto, eso sí, si en el minuto seis la Selección hubiera aprovechado la ocasión más clara del partido.
Imagen del penalti fallado por Mariona.
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Mariona se internó en el área en conducción por la derecha y Riesen llegó tardísimo a la disputa por el balón.
La jugadora del Arsenal, una de las grandes favoritas para el próximo Balón de Oro, asumió la responsabilidad de lanzar la pena máxima que ella misma había provocado, pero ajustó el disparo demasiado y el balón se fue desviado a la derecha de la portería rival.
El mazazo no cambió el guion de partido y España siguió con su presión elevada y su monopolio del balón. Suiza apenas pasó del centro del campo en dos ocasiones en toda la primera mitad.
Con el paso de los minutos, la ansiedad creció en las de Montse Tomé, erráticas en los metros finales. Faltó pausa y acierto en el último pase y también en los disparos.
Las llegadas se sucedían y, ante la telaraña defensiva, Claudia Pina, Olga Carmona o Aitana Bonmatí probaron suerte en varias ocasiones con disparos desde fuera del área que se iban muy desviados, uno tras otro.
En una contra, Suiza asomó las garras y Cata, que volvía después de su amigdalitis, mantuvo su único contacto con el balón.
La acción del penalti favorable a España.
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En la segunda excursión, Laia Aleixandri llegó tarde a un balón dividido y vio su segunda amarilla en el torneo, por lo que se perderá las semifinales.
Ante el atasco en el juego posicional, el balón parado cobró especial relevancia y las dos ocasiones más claras para España llegaron así.
Una falta magistralmente botada por Claudia Pina obligó a Livia Peng a realizar un paradón, mientras que Irene Paredes tuvo el gol al filo del descanso con un remate en el segundo palo a la salida de un córner que se estrelló contra el palo.
Segundo tiempo
La segunda mitad siguió el curso del primero durante los primeros veinte minutos. La Selección se mostraba espesa y el paso de los minutos se convirtió en una losa psicológica.
Alexia y Aitana se perdían poco a poco en la maraña defensiva y las zonas centrales se convirtieron en un tapón. España lo intentaba desde las bandas, pero el juego era muy previsible.
Pero la diferencia de nivel entre ambos equipos tenía que romperse en algún momento y así fue. España cuenta con dos jugadoras capaces de ganar el Balón de Oro, un privilegio que no tardó en ser aprovechado.
Claudia Pina celebra con Alexia Putellas el segundo gol de España a Suiza en la Eurocopa femenina 2025
Patri Guijarro estrelló otro balón al poste, también a la salida de un córner y rematando desde el segundo palo. Había que tocar alguna tecla.
Montse Tomé movió el banquillo y los cambios le sentaron bien al equipo. Mariona y Olga, que no tuvieron su día, dejaron su puesto a Athenea y Leila.
La jugadora del Real Madrid dinamitó el encuentro y abrió el marcador en el minuto 64 tras un taconazo magistral de Aitana. Athenea se plantó sola frente a la guardameta rival y la mandó a la red. 18 goles para ella con la camiseta de La Roja.
Salma y Aitana se abrazan al finalizar el encuentro.
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El gol permitió que España se sacudiese la presión y el partido entró en otra dimensión. De hecho, cuatro minutos más tarde, Claudia Pina hizo el segundo con un disparo precioso que se coló por la escuadra derecha.
La jugadora del Barça fue la más destacada de la noche, probablemente, y se marchó ovacionada después de haber ampliado la ventaja.
En la última media hora del encuentro, España durmió el partido y si el marcador no reflejó más goles fue porque la suerte no estaba de cara en estos cuartos de final.
La suerte y la precisión, claro. En otra buena incursión en el área rival, Athenea forzó el segundo penalti de la noche para España y, de nuevo, se desperdició la ocasión de sentenciar.
Si en el primer penalti Mariona la mandó fuera, en el segundo, Alexia disparó a media altura y Livia Peng le adivinó las intenciones.
En los minutos finales, las anfitrionas, más voluntariosas que capaces, se quedaron con diez después de que Maritz viese la roja directa por una fea entrada.
La victoria tuvo sabor a alivio, ya que el partido se complicó más de la cuenta. Por primera vez en la historia, España jugará unas semifinales de la Eurocopa femenina.
Francia o Alemania serán el rival en el césped, aunque lo visto este viernes en Berna refleja que España está por encima de cualquier equipo y que el mayor obstáculo a veces llega en forma de bloqueo mental. Lección aprendida.