Javier Moscoso, quien fue ministro de la Presidencia en el primer gobierno de Felipe González, ha fallecido esta pasada noche en Xàbia a los 90 años de edad. Desde hacía unos 30 años pasaba largas temporadas en este municipio, donde tenía casa. Era, de hecho, un enamorado de Xàbia. Esa pasión la compartió con el actor y director teatral Adolfo Marsillach o con Federico Ibáñez, editor y director general del libro con Jordi Solé Tura. Javier Moscoso mantenía una estrecha relación con la agrupación socialista local y con su secretario general, José Chulvi. Era una voz autorizada. Incluso formó parte de alguna de las candidaturas del PSPV local, pero siempre en los últimos puestos de la lista.
Javier Moscoso creó, en esa etapa de ministro de la Presidencia (entre 1982 y 1986), los llamados «días moscosos», las jornadas de libre disposición en la administración pública. Fue fiscal general del Estado entre 1986 y 1990. En 2006, durante el primer mandato de José Luis Rodríguez Zapatero, integró la delegación del Gobierno que negoció el final de ETA. Su experiencia política y jurídica eran muy valoradas.
Nació en 1934 en Logroño. Sus primeros pasos en política los dio con la UCD, partido por el que fue elegido diputado por Navarra en las primeras elecciones generales de 1979. Fue uno de los integrantes de la UCD que fundó en 1982 el Partido de Acción Democrática, que se integró en el PSOE. Sus firmes convicciones socialdemocratas y su gran conocimiento de la función pública lo convirtieron en un puntal del primer Gobierno de Felipe González.
En Xàbia deja muchísimos amigos. Sus hijos, Adriana y Juan, también tienen una estrecha vinculación con este municipio.