Inversiones en calles, parques, seguridad y vivienda coparon los anuncios de Natalia Chueca en un debate del estado de la ciudad en el que era difícil sorprender porque el Gobierno municipal, por tiempo y por presupuesto, tiene ya completo el calendario de obras para los dos próximos años. Por eso la regidora optó en su discurso por mirar más allá de 2027, año en el que se celebrarán las elecciones, para seguir prometiendo. Aunque en el tintero quedan todavía algunos proyectos que han sido anunciados o que están pendientes pero de los que nada se dijo, aunque eso no quiera decir necesariamente que no se esté trabajando en ellos.
Uno de los que sí se mencionó fue la reforma de la avenida San José, una obra que casualmente ya formó parte de la retahíla de anuncios que hizo Chueca el su discurso del debate del estado de la ciudad el año pasado. En aquella ocasión, eso sí, aportó cifras concretas. Esto fue lo que dijo: «Los servicios de Infraestructuras están trabajando ya en la redacción de los proyectos de reforma de la avenida San José y de la calle Pedro Cerbuna […]. El primero, la avenida San José, se reformará en el tramo comprendido entre la avenida Miguel Servet y la rotonda de Cesáreo Alierta con una inversión estimada de 4,5 millones de euros».
El pasado martes, sin embargo, sus palabras fueron algo menos concretas: «Pretendo avanzar también durante esta legislatura en la redacción de los proyectos de reforma de la avenida San José», afirmó la regidora, por lo que parece que en los últimos meses pocos han sido los avances a la hora de detallar estos trabajos. Cierto es que el área de Infraestructuras anda algo atareada últimamente, con una decena de obras en curso o que comenzarán próximamente.
La alcaldesa insistió mucho a lo largo de su discurso en que las inversiones llegan a todos los barrios, pero uno de los equipamientos pendientes que no mencionó y que debería estar en curso según lo anunciado es el centro cívico de Parque Goya, un edificio cuyo anteproyecto ya fue aprobado por el Gobierno municipal el pasado mes de septiembre y que cuenta ya con una cifra estimada de presupuesto: 5.573.429 euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución de 22 meses repartido en dos fases, una primera de 16 meses y otras de 6 meses. Incluso le pusieron fecha: principios de 2027, por lo que para cumplir los trabajos tendrían que haber comenzado ya.
Pero desde el pasado mes de septiembre poco más se ha sabido del nuevo centro cívico de Parque Goya, un equipamiento que lleva siendo una promesa electoral de los gobiernos municipales desde la época de Belloch. Chueca se comprometió a ejecutarla, pero no le dio espacio en su discurso.
Otro de los proyectos que Chueca se ha comprometido a reflotar y para el que ya se está trabajando desde el área de Proyectos Estratégicos son las piscinas de La Almozara. Este equipamiento lleva lustros pendiente, pero fue en el pasado mandato cuando se sacó de los cajones de la casa consistorial. No obstante, el primer intento fracasó y en el último año se ha reconducido para poder ejecutarlo a través de una empresa que pueda explotar el recinto deportivo durante los próximos 75 años.
¿Y el museo de la Semana Santa?
Este plan está en vías de ver la luz pero, curiosamente, nada se dijo durante el debate del estado de la ciudad por parte de la regidora. Puede que se trate de un olvido o de una baza que Chueca se guarde para más adelante.
En el apartado de equipamientos culturales, la alcaldesa anunció la reapertura del centro Las Armas, pero también hubo dos grandes vacíos: el museo de la Semana Santa, una promesa electoral del PP que parece que se les está atragantando a los responsables de Cultura del consistorio, y la rehabilitación y apertura del palacio de Fuenclara, una muestra magistral de arquitectura situada en el corazón de Zaragoza y que sigue a la espera de un plan para volver a la vida. Eso si no se cae antes.