La Guardia Civil ha detenido a un joven, cuya identidad y edad no han sido facilitadas, acusado de pegar una paliza y agredir sexualmente a una mujer en un piso del alterne de Alhama de Murcia, indican fuentes cercanas al caso.
Los hechos tuvieron lugar el pasado sábado, en un domicilio del citado municipio de la comarca del Bajo Guadalentín en el cual se ejerce el trabajo sexual. El individuo accedió al establecimiento como cliente y, al principio, no se mostró violento. Abonó el precio estipulado por estar con una de las mujeres, con la cual mantuvo primero relaciones sexuales consentidas, previa transacción económica.
Lo que ocurrió fue que, en un momento dado, la prostituta indicó al varón que se había pasado ya el tiempo que había pagado por sus servicios, y que tenía que marcharse. Fue en ese momento cuando, explican las mismas fuentes, el sujeto comenzó a ponerse agresivo hasta el punto de agredirla.
El hombre también golpeó a otra de las chicas y robó un teléfono móvil antes de huir del prostíbulo
El hombre, tal y como contó la víctima a los Cuerpos de Seguridad que se hicieron cargo del asunto, la emprendió a puñetazos contra ella. No solo eso: la agarró y forzó sexualmente contra su voluntad. Después de violarla, y antes de escapar, el sospechoso cogió un teléfono móvil que había en la estancia y se lo echó encima.
El individuo se cruzó, antes de salir a la calle, con otra de las mujeres que había en ese momento en el piso, y a ella también la golpeó. Entonces huyó, no saben si a la carrera o en algún tipo de vehículo que tuviese fuera. Las chicas telefonearon a pedir ayuda.
Se personaron en el piso de alterne agentes de la Policía Local de Alhama de Murcia, los cuales se entrevistaron con las afectadas, que relataron lo que había ocurrido y ofrecieron una descripción del cliente, un joven de entre 20 y 25 años y origen extranjero.
Al hospital
La mujer que había sido agredida física y sexualmente fue trasladada a un centro de salud primero y a un hospital después, para ser curada de sus lesiones y ser sometida al examen de un profesional forense que corroborase la agresión. Se trata de un protocolo habitual en estos casos de violencia sexual. Tras pasar por la clínica, la perjudicada recibió el alta y pudo regresar a su domicilio.
El caso fue puesto en conocimiento de la Policía Judicial de la Guardia Civil, cuerpo con competencias para hacerse cargo del mismo. Con la descripción del individuo, los profesionales del Instituto Armado apenas tardaron unos días en dar con su paradero. El chico fue localizado y detenido como presunto autor de un delito de agresión sexual, dos delitos de lesiones y otro de robo, por sustraer de forma violenta el teléfono móvil de una de las mujeres.
El sospechoso será puesto a disposición judicial en Totana, que es el partido judicial al que pertenece Alhama de Murcia.
