Iga Swiatek es la octava campeona en ocho años en Wimbledon. La polaca superó en la gran final a Amanda Anisimova (6-0 y 6-0) y se alzó con su sexto Grand Slam, consiguiendo ganar en todas las superficies, tras sus triunfos en Roland Garros 2020, 2022, 2023 y 2024, y en el US Open 2022.
Dominando de principio a fin, la polaca hizo bueno el dicho de que las finales no se juega, sino que se ganan. Y nadie mejor que ella para abanderar el dicho, manteniendo su pleno de victorias en las finales de Grand Slam. Seis de seis, algo que solo habían podido conseguir Margaret Court y Monica Seles. La polaca está sin duda entre las grandes de la historia.
En una demostración de temple y de saber estar, la polaca dominó desde buen inicio ante una Anisimova que vio el sueño de su primer gran título muy lejos en todo momento. Firme al servicio y peligrosa en todo momento desde el resto, la polaca se alzó como nueva reina en el All England Club, donde nunca ninguna compatriota suya lo había podido conseguir.
Swiatek dejó un marcador para la historia (6-0, 6-0). Su rival se vio totalmente superada y no fue capaz de lograr ni un solo juego. En el set inicial, tan solo consiguió nueve puntos, dejando una final sin ninguna competitividad. Tan solo se ha dado dos veces un marcador con doble ‘rosco’ en una final femenina de Grand Slam: en Wimbledon 1911 y en Roland Garros 1988.
DESDE SERENA
El triunfo en la hierba completa todas las superficies para Swiatek, que es la mujer más joven en conseguirlo desde que lo hiciera Serena Williams en 2002.
Cien triunfos para Swiatek en los 120 partidos en torneos Grand Slam, siendo la mujer más rápida en conseguir llegar al centenario de triunfos con menos partidos que precisamente también Serena, que lo logró con cuatro partidos menos.
Un triunfo tan deseado como reconfortante para una Swiatek que no pasó por su mejor momento en el inicio de año, llegando incluso a barajarse la posibilidad de que no acudiera a Wimbledon para descansar.
Lejos de ello, el destino tenía preparado otro final para la polaca, que en el lugar menos esperado, vuelve a reinar.