El Orgullo de Los Alcázares va camino de convertirse, si no lo ha hecho ya, en el evento LGTBI más importante de la Región de Murcia con solo dos ediciones. El plato fuerte, que llega este fin de semana con actuaciones musicales (se espera a Sonia y Selena) y el pregón, no se lo ha querido perder el secretario LGTBI del PSOE, el exjugador de waterpolo Víctor Gutiérrez, que este viernes charlará en el Ayuntamiento sobre LGTBIfobia.
Ha sido testigo de una de las marchas del Orgullo más reivindicativas de los últimos tiempos, la de Budapest. ¿Cómo lo vivió?
Allí está prohibida la exhibición de símbolos del colectivo y recuerdo que, estando a punto de embarcar en el avión, me quité el pin del arcoíris de la chaqueta, como si fuera a una zona de guerra cuando estaba viajando a un país de la UE. Me sorprendió mucho. Teníamos información de que se había programado una manifestación neonazi y el ministro de Justicia envió una carta a las autoridades para avisarnos de que, si incumplíamos la ley, nos atuviéramos a las consecuencias. Pese a todo, tenía claro es que la respuesta iba a ser muy contundente y no me equivoqué. Fue un jaque mate a esas políticas que pretenden recortar nuestros derechos.
¿Entonces no hay peligro de que se extiendan esas políticas LGTBIfóbicas por la Unión?
Por supuesto que lo hay. En Bulgaria y Rumanía están aprobando leyes que beben de la ley húngara, que, al mismo tiempo, se apoya en la de Rusia. Al final, todo esto es propaganda rusa. En España tenemos a los socios de Orbán, Vox. No podemos pensar que por tener aquí una serie de derechos reconocidos no pueda producirse una involución.
«Esta celebración va a ser una experiencia más bonita, más familiar y más entrañable»
Madrid sigue siendo una plaza fuerte para el Orgullo.
Madrid es uno de los ‘orgullos’ más importantes del mundo, a pesar de quien gobierna, porque tanto Ayuso como Almeida cada año trabajan en contra de que esta fiesta se pueda celebrar como debería. Este evento reivindicativo deja 400 millones de euros en la ciudad y los colectivos prácticamente no tienen aportación económica por parte ni de la Comunidad ni del Ayuntamiento. Pero lo que a las personas del LGTBI nos importa es que no se toquen nuestros derechos. Por desgracia, en Madrid hemos sufrido el primer retroceso LGTBI de la historia de la democracia con el recorte de la Ley LGTBI y Trans. Han abierto la puerta a que se puedan aplicar terapias de conversión a personas trans.
La inclusión de estas terapias en el Código Penal parece contar con el apoyo del PP en el Congreso.
Ha apoyado la toma en consideración, pero sabiendo que estábamos en el mes del Orgullo. Me consta que están a favor de criminalizar las terapias por orientación, pero tienen un debate interno muy incómodo con el tema de las terapias de conversión a personas trans. Veremos en el trabajo parlamentario dónde se sitúa el PP.
Pasa del Orgullo de Madrid al de Los Alcázares. Vaya cambio.
Este verano también he estado en el de Marmolejo, Jaén. Procuro ir a sitios pequeños porque en las ciudades grandes este tipo de celebraciones ya andan solas. Es más fácil ser una persona LGTBI en Madrid, Valencia, Sevilla o Murcia que en un pueblecito. Sin embargo, el ambiente en lugares como Los Alcázares es mucho más familiar. Aquí voy a estar con los propios vecinos. Todo es mucho más identificable; es una experiencia más bonita, más familiar y más entrañable.
«El PP tiene un debate interno muy incómodo con las terapias de conversión a personas trans»
¿Qué le dice a esa gente que aún reclama el Día del Orgullo Hetero?
Me da pereza la gente con tan poca capacidad para ponerse los zapatos de los demás, pero la situación que vivimos a nivel internacional requiere que todos hagamos un esfuerzo por defender lo que tenemos y por explicarlo. Los derechos LGTBI son derechos humanos. A mí no me hace falta ser mujer para luchar por la igualdad, no me hace falta ser negro para estar contra el racismo y creo que a nadie le hace falta ser LGTBI para entender esta lucha como propia. Ellos no se tienen que sentar con sus padres a contarles con miedo a que les puedan echar de casa quiénes son. No sufren acoso en el colegio, no tienen que estar en el armario en sus trabajos. La tasa de suicidio de los menores LGTBI triplica la del resto de la población.
Sabe que Vox ha vetado las partidas LGTBI de los presupuestos.
Me parece de extrema gravedad que Vox utilice como moneda de cambio los derechos del colectivo LGTBI y que el PP haya entrado en su juego cuando López Miras tenía encima de la mesa una propuesta del secretario general del PSOE de la Región de Murcia, Paco Lucas, sin ningún tipo de líneas rojas. Esta comunidad tiene una ley derogada ‘de facto’ por la inacción de su gobierno, que no la ha dotado de ninguna partida presupuestaria y cuyo Observatorio contra la LGTBfobia se ha reunido en nueve años una sola vez, además de que no ofrece ningún tipo de formación en centros educativos. Es una tomadura de pelo. Al final, esto demuestra que están mimetizados con Vox.