Este martes, Juanma Castaño invitó a El Partidazo de COPE a Iñigo San Millán, que es la persona que ha acompañado a Tadej Pogacar desde antes de que fuera profesional, desde 2018.
Ha sido un entrenador personal, quien le ha cuidado la nutrición, el que le ha preparado físicamente. Actualmente trabaja para el Athletic Club, pero sigue ligado a ciclistas como Ayuso, y desde luego que no pierde ojo de lo que hace el mejor ciclista del momento en todo el mundo.
Tadej Pogacar suma su victoria número 100 en el Tour
Iñigo nos ayudó a entender por qué Pogacar es tan bueno y qué es lo que tiene que le hace tan diferente a todo lo que ha existido.
San Millán asegura que, cuando descubrió a Pogacar en el UAE, en 2018, ya tenía algo diferente: «Como director de rendimiento, ya se veía que este corredor iba a ser de otro nivel. Como amateur, había hecho grandísimas carreras pero tenía que mejorar distintas áreas, y ahí es donde empezamos a trabajar con él, pero rápidamente le vimos que tenía un potencial enorme».
La clave que hace que Pogacar sea el mejor tiene que ver con el metabolismo de su propio cuerpo: «Tiene una capacidad metabólica muy importante, tiene una eficiencia metabólica, por decirlo de alguna forma. Cuando el resto de corredores van a 8.000 revoluciones por minuto, él sigue yendo a 3.000. Entonces, él tiene todavía algunas marchas más que la media».
En otras palabras: «Es lo que se llama actividad mitocondrial. En la mitocondria es donde se produce la energía en el músculo y donde se produce una cantidad de lactato increíble. Yo nunca he visto un deportista con esa cantidad de producción de lactato«.
Castaño recordó cuando se hablaba de Miguel Induráin y sus 28 pulsaciones por minuto en reposo. En este sentido, Iñigo San Millán recordó que un deportista de élite puede tener, de normal, entre 38 y 42 pulsaciones en reposo, pero que en el caso del esloveno, lo extraordinario está en «las adaptaciones a nivel metabólico local a nivel muscular de producir energía«.
No se atrevió a valorar si será el mejor ciclista de todos los tiempos, pero hay un dato que invita a pensarlo: nadie, con su edad, había alcalzado el palmarés que ya tiene. Él, con menos edad que Induráin, ya tiene tres. El navarro ganó su primera ronda francesa con 27 años.
Tadej Pogacar sumó en la etapa de este martes (4ª etapa) su victoria cien y lidera el Tour de Francia.