Decenas de miles de personas –un millón, según han informado a Europa Press los convocantes, y 250.000, según Delegación del Gobierno— han asistido este sábado a la manifestación del Orgullo de Madrid (MADO 2025), que ha arrancado a las 19:00 horas desde la Plaza del Emperador Carlos V, bajo el lema ’20 años avanzando en derechos: ni un paso atrás’.
Según las organizaciones convocantes, en la marcha han participado más de 100 grupos y 47 carrozas, con Manuel Turizo y Karol G, en dos de ellas.
Entre otras autoridades, han marchado en cabecera la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, la ministra de Sanidad, Mónica García, la secretaria general del PSOE Madrid Ciudad y portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento, Reyes Maroto, y el secretario LGTBI del PSOE, Víctor Gutiérrez.
Los manifestantes han comenzado a marchar por el Paseo del Prado tras la pancarta de cabecera en la que se leía ’20 años avanzando en derechos: Ni un paso atrás‘, entre gritos de «ni un paso atrás» y portando carteles en los que se podían leer lemas como ‘Los derechos trans son derechos humanos’, ‘Make Love, boycott Trump’ o ‘Educadores y partidos, cómplices de la homofobia’.
Por los altavoces, animaban a los asistentes a participar en la celebración: «Vivan las personas del colectivo bisexual, vivan los transexuales, vivan las lesbianas, vivan los gays». También se han escuchado gritos de «Palestina libre» y denuncias como: «Basta de terapias de conversión».
Pulveruzadores de agua
Algunas personas de la organización han ido refrescando a los asistentes con pulverizadores de agua, frente a las altas temperaturas que han superado los 34 grados. Tampoco han faltado los grandes abanicos con la bandera arcoiris que se movían al ritmo de la música.
Además de las personas que marchaban detrás de las pancartas, cientos de ciudadanos han tomado posiciones a lo largo del Paseo del Prado y Recoletos para ver el desfile.
Un momento de la marcha del Orgullo 2025 en su recorrido por las calles de Madrid.
Los organizadores han animado a recorrer las calles de Madrid para seguir diciendo «sí» 20 años después. «Seguimos diciendo que sí, que sí queremos. Que sí queremos que se desarrolle la ley LGTBI+, y trans, y que se nos proteja de los discursos de odio y de sus consecuencias. Y por eso hoy también estamos pidiendo la aprobación urgente y necesaria de un pacto de Estado contra los discursos de odio hacia los grupos vulnerables», ha reclamado la presidenta de la Federación Estatal LGTBI+, Paula Iglesias.
Además, el presidente de COGAM, Ronny de la Cruz, ha animado a luchar contra la «ola reaccionaria de odio que está creciendo año a año» a nivel internacional. «Hace apenas unas semanas en Budapest toda la población civil se enfrentó a la prohibición y llenó las calles de Budapest de diversidad, de alegría y de reivindicación. Para él, para Víctor Orban, no fue posible. Le pasó por encima esa ola, le pasó por encima el arco iris», ha subrayado.
Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno, encabeza una de las pancartas durante la marcha del Orgullo en Madrid.
En un momento de la marcha, Yolanda Díaz ha salido por delante de la pancarta de cabecera y tras bailar al ritmo de la música se ha besado con dos activistas del colectivo LGTBI+.
«Ni un paso atrás»
Otro momento destacado lo han protagonizado a su llegada al Ayuntamiento de Madrid, donde han criticado que el alcalde, Jose Luis Martínez Almeida no haya colgado la bandera arcoiris y han dicho «basta» a que se les «criminalice». «Digamos al alcalde: ‘Viva el orgullo. Ni un paso atrás«, han gritado, mientras se escuchaba de fondo la canción ‘Zorra’.
Entre las miles de personas que han asistido a la manifestación, se encontraba Puri, de 55 años, que ha acudido con su hija para demostrarle todo su apoyo, ya que hace años, cuando le contó que era lesbiana, no se comportó bien.
«No me comporté bien, no la acepté y quiero que sepa que la apoyo. Me di cuenta que la que tenía el problema era yo», ha explicado Puri a Europa Press, mientras portaba una pancarta en la que se leía: ‘Orgullo también es ser la mamá que muchos necesitan’.
También se encontraban entre los asistentes familias como la formada por Carolina, Federico y su hija Rafaela, de un año. «Somos familia del colectivo y queremos compartirlo», ha explicado Carolina, que ha subrayado que en su país, Argentina, hay «una ola muy fuerte» de «la ultraderecha» contra los derechos LGTBI+.
Tras dos horas de marcha, pasadas las 21:00 horas la cabecera de la manifestación ha llegado a la Plaza de Colón, donde se ha procedido a la lectura del manifiesto, en el que han advertido de «un retroceso global en derechos».
«Vemos cómo el odio se disfraza de libertad de expresión, cómo se atacan nuestras infancias, nuestras familias, nuestras identidades. Se nos ridiculiza, se nos censura, se nos invalida, se nos niega nuestra identidad. Desde tribunas políticas, desde platós de televisión, desde cuentas anónimas en redes sociales. Se cuestiona nuestra existencia con una impunidad que duele. Pero no nos vamos a esconder», han subrayado.
Pacto de Estado
Además, han exigido un Pacto de Estado contra los discursos de odio hacia todas las personas vulnerables: LGTBI+, migrantes, racializadas, con discapacidad, sin hogar, gitanas, mujeres, mayores y menores.; y han reclamado el «desarrollo completo» e «implementación efectiva» de las leyes autonómicas, la Ley Estatal LGTBI+ y Trans.
También han pedido el reconocimiento automático de la filiación en las parejas de mujeres; que se garantice la protección y regularización de las personas trans migrantes, una educación «pública, inclusiva y valiente, que enseñe desde la diversidad» y una sanidad pública «libre de prejuicios».
Asimismo, han recordado que en más de 60 países ser LGTBI+ sigue siendo un delito por lo que han exigido «una política exterior clara, coherente y valiente» y que se reconozca y garantice el derecho de asilo para personas perseguidas por su orientación sexual, identidad o expresión de género. «Queremos que España sea refugio real, no solo bandera simbólica», han remarcado.