Su comportamiento era de sobra conocido. Incluso, por el propio secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, quien ya recibió quejas de su conducta inapropiada semanas antes de que ganara la moción de censura, en 2018.
Así lo aseguran fuentes del Partido Socialista que formaban parte del núcleo duro de Ferraz en aquella época.
Paco Salazar ha renunciado este sábado al cargo orgánico que iba a ocupar como adjunto a la Secretaría de Organización del PSOE tras los cambios que ha hecho Sánchez por la salida de Santos Cerdán.
También ha solicitado abandonar su posición como secretario general de Coordinación Institucional en la Moncloa, cargo en el que llevaba desde 2022.
Según ha confirmado EL ESPAÑOL, en la sede del PSOE era conocido su comportamiento hacia las mujeres y la forma en la que las incomodaba.
«Es uno de esos hombres de los que huyen las mujeres», explican. «Cuando te da dos besos te pone la mano por debajo de los riñones«, relatan. Una destacada exdirigente del PSOE, añade el calificativo de «baboso».
Quejas a Sánchez
De esas formas machistas hubo quejas constantes desde su llegada a la política a Madrid, en 2017, procedente de Sevilla. Esto es, antes de la moción de censura que llevó a Sánchez a la Moncloa.
La inquietud en su círculo fue tal, que su comportamiento llegó a oídos del líder socialista. Pedro Sánchez recibió de algunos componentes de la dirección socialista de entonces denuncias referidas a sus «comentarios fuera de lugar», «miradas incómodas» o» llamadas y mensajes fuera de horario laboral».
Su modus operandi consistía, explican, en comentarios extemporáneos de carácter sexual o invitaciones a cenar para abordar asuntos de trabajo.
Las mismas fuentes explican que, en un momento dado, el líder socialista se llegó a plantear prescindir de él.
Sin embargo, Sánchez ganó la moción de censura a Mariano Rajoy y, por tanto, la Presidencia del Gobierno. Y todo quedó aparcado.
En aquel entonces Salazar era miembro de la Ejecutiva del partido y uno de los fontaneros de Ferraz. Su labor en Andalucía había permitido a Sánchez deshacerse de Susana Díaz.
Esos años fue uno de los hombres fuertes de Sánchez, junto a José Luis Ábalos y Santos Cerdán. «Estaban los tres en Madrid, solos y sin sus mujeres», recuerdan las fuentes consultadas por este diario.
Paco Salazar marchó de Ferraz rumbo a Moncloa de la mano de Iván Redondo, entonces director de gabinete de Pedro Sánchez.
Junto a ellos se incorporaron también el ahora ministro de Presidencia, Félix Bolaños, y quien a partir de este sábado es adjunto a la Secretaría de Organización del PSOE, Borja Cabezón.
Entonces Salazar ocupó el puesto de director general del Departamento de Análisis y Estudios de la Presidencia del Gobierno
A partir de 2019, pasó a ser director adjunto de la Presidencia del Gobierno. Una posición que ocupó hasta 2021 cuando abandonó Moncloa rumbo al Hipódromo de Madrid.
Su carrera
Allí permaneció un año hasta que se convirtió en secretario general de Planificación Política del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, cargo que ocupó desde 2022 hasta que el año pasado pasó a la que era su actual posición como secretario general de Coordinación Institucional en La Moncloa.
Precisamente desde el palacio presidencial han llegado las denuncias de acoso que le han costado su renuncia este sábado, el mismo día que debía ser proclamado miembro de la Secretaría de Organización.
Según ha publicado eldiario.es, existen varios testimonios de trabajadoras que le acusan de «acoso sexual», «abuso de poder» y «comportamiento inapropiado».
Los relatos de estas mujeres son estremecedores, pues aseguran que si no respondían a las demandas de Salazar, éste las apartaba o les retiraba parte de su trabajo.
Según esos mismos testimonios, cuando una mujer llegaba al equipo de Paco Salazar en Moncloa se le daba un aviso por parte de sus compañeras para que no estuviera mucho tiempo «a solas» con él.
Minutos antes de abrir sus puertas el Comité Federal, el partido ha anunciado este sábado que Paco Salazar había solicitado voluntariamente la apertura de unas diligencias previas para investigar las acusaciones contra él.
Salazar también ha pedido «ser apartado de sus funciones actuales en la Comisión Ejecutiva Federal».
Este órgano abrirá una investigación para esclarecer los hechos, pese a que no ha recibido ninguna denuncia oficial contra él a través de los canales que tiene habilitados el partido.
A este espinoso asunto no se ha referido Pedro Sánchez, en su discurso en el Comité Federal. Tan sólo se ha limitado a pedir que las denuncias de acoso se tramiten por los canales oficiales.