La defensa del ex secretario de Organización del PSOE Santos Cerdán ha presentado en el Tribunal Supremo un recurso en el que se opone al ingreso en prisión del exdirigente socialista y se muestra muy crítico con el magistrado Leopoldo Puente al que atribuye una interpretación de los indicios «en contra de reo», lo que supone una vulneración de su presunción de inocencia. Denuncia una discriminación respecto a los otros imputados en el procedimiento, que están en libertad, el exministro José Luis Ábalos y su asesor Koldo García Izaguirre.
Su abogado, Benet Salellas, que fue diputado de la CUP y que participó en la defensa del expresidente de Òmnium Culturla Jordi Cuixart durante el juicio del ‘procés’, afirma que «no llega a comprenderse como el relato indiciario se construye a partir de la pretendida relación directa de Santos Cerdán con Servinabar si dicha empresa tampoco aparece relacionada con las adjudicaciones investigadas», si las obras del túnel de Belate no están incluidas, al menos de momento, en el procedimiento, y no se especifica la adjudicación de la mina de Servinabar en la que se centra el inicio de la presunta trama de corrupción.
Asegura que «la indeterminación de qué fuentes quiere proteger no es una mera omisión del órgano jurisdiccional, es la certificación que no se sabe donde están las pruebas precisamente porqué estas pruebas no existen».
El letrado ya se opuso a la medida de internamiento con distintos argumentos, todos ellos centrados en una hipotética manipulación de los audios en los que se basa la acusación contra su cliente, por lo que anunció la realización de una pericial para comprobar si han sido de alguna forma alterados.
En sus alegaciones contra la prisión, el letrado consideró sospechoso que el exasesor Koldo García Izaguirre hubiera guardado durante años grabaciones de encuentros, así como mensajes de whatsapp y correos, y lo relacionó con la colaboración que habría prestado a la Guardia Civil, que llegó a condecorarle, lo que le llevó a calificarle de «agente provocador».