Holger Rune, Daniil Medvedev, Stefanos Tsitsipas, Matteo Berrettini. Son algunos de los ilustres que se despidieron ya de Wimbledon en la primera jornada, despejando aún más el futuro camino del español Carlos Alcaraz por la parte baja del cuadro.
El alemán Alexander Zverev y el estadounidense Taylor Fritz están también con el agua al cuello, muy atosigados por sendos rivales franceses, Arthur Rinderknech y Givoanni Mpetshi Perricard, respectivamente.
Ambos fueron expulsados de la pista central y 1, las únicas en las que se jugó con iluminación artificial una vez se cerraron ambos techos retráctiles. No pudieron acabar sus respectivos encuentros, para bien o para mal (ya se verá en la reanudación del martes), al cumplirse la regla más sagrada de Wimbledon.
Es más estricta incluso que la de la vestimenta blanca. Porque en el All England Club no hay tenis a partir de las 11 de la noche, en un acuerdo con la comunidad vecinal de esta zona noble del sur de Londres.
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Fritz, reciente campeón en Eastbourne y quinto jugador mundial, rozó la eliminación ante Mpetshi Perricard sin conceder una sola bola de ‘break’. Están 6-7 (6), 6-7 (8), 6-4, 7-6 (6), después de 2h.53′, con el americano sobreviviendo gracias a levantar un 1-5 en el ‘tiebreak’ del cuarto. Ya ni comenzaron el quinto para no invadir el horario prohibido.
Zverev, tercero en la clasificación mundial, reemprenderá su choque con 6-7 (3) y 6-7 (5), al borde del KO ante el agresivo y estilista Rinderknech, que dispuso de tres bolas de set en el segundo para ir por delante en el marcdor.
