En su nueva sesión con Tolga, la doctora ha recalcado el sentimiento que la persigue desde que dejó a Timur: culpa. «Sé que es ridículo, pero siento que lo estoy traicionando«, ha dicho, con los ojos bajos. «Él fue mi primer novio. El único».
Tolga le ha pedido que cierre los ojos y escuche a su cuerpo. Bahar ha señalado su pecho: «Aquí siento la culpa», ha susurrado. Luego, ha recordado a su padre. «Era muy difícil de contentar. Cuando entré en medicina, no me habló en tres días», ha contado.
Ha explicado que su madre fue «una esclava» que vivía para hacer feliz a su marido. «Desde fuera, él era un ángel. Pero en casa… teníamos que andar con cuidado». Tolga ha preguntado si hubo violencia en su matrimonio con Timur. Bahar lo ha dejado claro: «Violencia física, no. Nunca me tocó”. Pero sí se ha dado cuenta de que hubo psicológica. Y en esa frase, ha resumido todo su dolor.