Mallorca ha sido el destino elegido para el reencuentro de la estadounidense Alix Earle con sus excompañeras de facultad, una reunión que no se producía desde su graduación universitaria. Los vídeos de la experiencia ya suman millones de visualizaciones y comentarios que preguntan por cada rincón que pisaron.
La influencer, que suma más de cuatro millones de seguidores y es conocida por su pódcast Hot Mess, ha documentado cada detalle de su estancia en la isla balear, donde ha pasado ocho días antes de continuar el viaje hacia Croacia.
Un viaje viral en Mallorca que empezó con lágrimas
Aunque sus vacaciones tenían todos los ingredientes para ser idílicas, la experiencia comenzó con un episodio que ella misma calificó de estrepitoso. “Me perdí el primer día porque no tenía datos móviles”, relató Earle en sus historias. Tras aterrizar, deambuló sin poder contactar con sus amigas hasta que, finalmente, acabó llorando en casa de un desconocido. Por si fuera poco, también sufrió la cancelación de su vuelo de ida.
Instaladas en una villa con piscina en plena Serra de Tramuntana, la influencer y su grupo disfrutaron de la tranquilidad y privacidad del interior de la isla, aunque bromearan con el largo camino a pie que debían hacer cada noche para llegar después de salir de fiesta.
Desde allí organizaron excursiones a lugares como Deià y Camp de Mar, donde alquilaron un barco para recorrer la costa y bañarse lejos de la orilla. También, dedicaron varias mañanas a navegar en velomares y a relajarse en beach clubs, donde alternaron cócteles y tapas con largos ratos de sol.
Una de las escenas más comentadas fue su visita a Sa Foradada, donde contemplaron el atardecer con vistas al mar. Las noches tampoco se quedaron atrás: las amigas salieron a la discoteca Amok, conocida por su ambiente internacional. Su experiencia, que empezó con un día de llanto y desorientación, ha terminado por consolidar Mallorca como el destino soñado para unas vacaciones de lujo con amigas.