Habrá bilateral Estado-Generalitat para formalizar la financiación singular de Catalunya, pero será a mediados de julio, un poco más tarde del plazo que acordaron el PSC y ERC y que expira este lunes. Así lo asegura la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en una entrevista que El Correo de Andalucía, diario del grupo Prensa Ibérica, publicará este domingo. Mientras tanto, el president Salvador Illa continúa negociando contra reloj con los republicanos la propuesta, que el Govern querría presentar antes del martes para ceñirse al calendario fijado en la investidura.
«Va a haber comisión bilateral, posiblemente unos días más tarde de esa fecha, que siempre son orientativas. Da igual que sea el día 30, el día 14 o el 15, pero en ese entorno se va a producir», asegura Montero en la entrevista, en la que explica que la materia que se maneja es «muy compleja» porque debe aglutinar el apoyo de una mayoría en el Congreso dispuesta a aprobar la ley. Es por eso que, como avanzó EL PERIÓDICO, la ministra ha pedido un poco más de tiempo.
Abordar el modelo «de forma multilateral»
En estos momentos, partidos como Compromís, el BNG o Més Mallorca, que forman parte de la mayoría que hasta ahora han sostenido el Gobierno de Pedro Sánchez, reclaman que el modelo beneficie también a sus respectivas autonomías. «También hay que hablarla de forma multilateral y con el conjunto de los territorios, no es algo fácil», esgrime la vicepresidenta, que es también candidata en Andalucía. ERC ya lleva semanas señalando a la ministra como principal «freno» de los avances con argumentos como que faltan atar los apoyos o incluso, aseguran, los 11.000 millones de más que el Gobierno se ha comprometido a destinar en Defensa.
Va a haber comisión bilateral, posiblemente unos días más tarde de esa fecha, que siempre són orientativas. Da igual que sea el día 30, el día 14 o el 15, pero en ese entorno se va a producir
Según Montero, no puede pactarse una financiación para Catalunya al margen del resto de comunidades, algo que topa con la bilateralidad que siempre han exigido desde ERC. «Los próximos modelos de financiación tendrán que incorporar un reconocimiento a las singularidades y a la diversidad territorial de nuestro país. Pero para todos, no solo para Catalunya«, sentencia, además de defender un «mayor volumen de recursos» para todas las autonomías y que estas sean «más partícipes» de la recaudación.
El ojo avizor de ERC
Justamente este sábado será Oriol Junqueras quien se pronuncie sobre la negociación de la financiación ante el consejo nacional del partido. Los republicanos reclaman no solo que se cumpla con el calendario -pese a que no ven inconveniente en que se retarde unas pocas semanas si es para cerrar «un buen acuerdo»-, sino también que el modelo sea fiel a los términos en los que se comprometió el PSC, que son que la Generalitat recaude y gestione todos los impuestos y que la cuota de solidaridad no vaya en detrimento del principio de ordinalidad en el reparto de recursos.
Fuentes del Govern, además de mantener que trabajan para cumplir «en tiempo y forma» para que el lunes quede reafirmado el compromiso con la mejora de la financiación, aseguran que el año que viene la Agència Tributària de Catalunya estará en disposición de recaudar todo el IRPF, como quedó reflejado en el pacto de la investidura de Illa. «Eso va a pasar», insisten. Para ello han aprobado incorporar 200 trabajadores nuevos a la hacienda catalana. «Si el señor Illa dice que sí, pues lo suscribo», dice Montero, que apunta, sin embargo, a que eso probablemente sucederá de forma progresiva si el modelo prospera.
«No dejaremos de trabajar, pero costará», auguran fuentes de la cúpula de ERC, que confirman que continúan negociando, al margen de la puesta de largo de la bilateral, para ver si es posible una entente antes del martes que ya han advertido que tiene que tener sustancia y no ser una simple fotografía. Si no es así, no se levantarán de la mesa y seguirán hablando, pero recuerdan que el president de la Generalitat sabe, porque así se lo han trasladado por activa y por pasiva, que no van a abrir la carpeta de los presupuestos de 2026 si no se avanza en la financiación. Y para Illa, que quiere abrir ese melón después del verano, esas cuentas son cruciales para garantizarse la estabilidad para el resto del mandato. De ahí la premura entre bambalinas que amenaza con alargarse todo el fin de semana.