Pilar Crespo Rodríguez, jefa del Área de Estructuras de Carreteras, sacó «al menos seis cajas de documentos» durante la entrada de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) en el Ministerio el pasado viernes.
Fuentes internas del Ministerio aseguran a EL ESPAÑOL que esta alto cargo de Transportes coló, sin autorización de los vigilantes, a un mensajero para que se llevara las cajas por la puerta trasera del Ministerio.
Este acceso está dedicado únicamente a la carga y descarga, y el mensajero no tenía permiso para entrar en el edificio oficial.
Crespo bajó y, a pesar de la resistencia de los vigilantes, facilitó la entrada del mensajero sin que quedara registro alguno en Transportes.
Esto sucedió cuando los agentes de la UCO llevaban ya unos minutos en las dependencias del Ministerio.
Personal de Transportes avisó entonces por vía interna al jefe de seguridad, el inspector de Policía Raúl Sánchez Núñez, sin que recibieran respuesta alguna.
Es por ello que entonces decidieron alertar a los agentes de la UCO presentes en ese momento en el Ministerio para recoger los documentos de los contratos investigados de Carreteras y Adif, y para clonar el correo electrónico de José Luis Ábalos.
Sin embargo, la Guardia Civil no tenía orden de registro, sino únicamente para hacerse con la documentación solicitada por el juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente.
Por ello, y según fuentes internas del Ministerio, los agentes de la UCO explicaron al personal de Transportes que no podían hacer nada ante esa situación.
Las cajas que Pilar Crespo sacó de Transportes pertenecían a la Dirección General de Carreteras, entidad que la Guardia Civil visitó el pasado viernes para hacerse con la información de los supuestos contratos amañados que aparecen citados en las grabaciones de Koldo García Izaguirre.
El director general de Carreteras hasta octubre de 2022, Javier Herrero Lizano, está siendo investigado por el Tribunal Supremo junto a la expresidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, por su colaboración con la trama en las adjudicaciones a las constructoras que pagaron mordidas.
Ese mismo día, la UCO entró también en la sede del PSOE para clonar el correo del ya ex secretario de Organización del partido Santos Cerdán.
La seguridad del Ministerio de Transportes está bajo el mando de Belén Villar, directora general de Organización e Inspección.
Villar fue la encargada de realizar la auditoría de Óscar Puente, que ha sido criticada por otros altos cargos de Transportes por no reflejar con exactitud lo que declararon.
Además, dicha auditoría y la revisión de los contratos de obra pública están bajo sospecha tras el último informe de la UCO.
Según revelan fuentes internas de Transportes, Villar sacó un disco duro del Ministerio el 24 de abril sin cumplir con el propio protocolo que ella misma debe hacer cumplir a los trabajadores.
Otro mensajero, este identificado como de la empresa Rodrigo, recogió esta memoria de la Dirección General de Organización e Inspección.
El disco duro fue entregado por una persona de confianza de Villar, llamada Conchi.
La normativa prohíbe sacar cualquier documentación del Ministerio sin haber informado antes y sin haber dejado constancia de qué contienen exactamente los archivos.
Más salidas de documentación
El mensajero, según fuentes internas del Ministerio, «era un chico moreno con tatuajes». Tras la entrega se realizó una llamada a Teresa González, jefa de servicio en Transportes, para comunicarle que la memoria externa ya había sido enviada.
En los últimos meses se han denunciado varios casos en los que cargos de Transportes han sacado documentación sin permiso del edificio oficial.
De hecho, tal y como desveló OkDiario, empleados del Ministerio también afirman que Villar habría facilitado documentación a Acciona, investigada por las mordidas cobradas por Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García.
El 19 de junio, un hombre, que se identificó como un empleado de Acciona, se llevó documentación del despacho 346 que ocupa Belén Villar a las 13:50 horas.
Este misterioso emisario de Acciona abandonó el edificio por la entrada restringida para altos cargos.
Fuentes internas del Ministerio afirman que Villar cuenta con la complicidad del jefe de seguridad e inspector de Policía para sacar documentos del Ministerio.
Raúl Sánchez Núñez fue nombrado a propuesta de la directora de Organización e Inspección de Transportes.
Fuentes cercanas a Ábalos y Koldo indican que Belén Villar es una de las personas de Pepe Blanco que continúan en la estructura del Ministerio con Óscar Puente.
La sombra de Pepe Blanco
EL ESPAÑOL publicó en exclusiva este martes que Ábalos y Koldo apuntan a Pepe Blanco como jefe de una red de influencias para conseguir contratos de Transportes.
Según pudo conocer este periódico, el exasesor de Ábalos tendría en su poder «más grabaciones en las que se nombra a Pepe Blanco o incluso participa».
Villar es una de las personas que llegó al Ministerio de Transportes de la mano de Pepe Blanco en 2009 y que se ha mantenido desde entonces en cargos de responsabilidad.
Durante los últimos meses, Villar ha sido denunciada por los vigilantes de seguridad del Ministerio de Transportes.
El sindicato UGT le ha acusado de «crear un grupo organizado» con personas afines que cobran más de 60.000 euros al año y han anunciado que tomarán «las acciones y medidas legales oportunas para conseguir la asignación de complementos del personal laboral de una manera objetiva y justa».
También ha sido señalada por los trabajadores del Ministerio por haber cometido posibles irregularidades en el procedimiento de un nuevo contrato de seguridad y vigilancia.
Según estas denuncias, Villar se habría reunido con los empresarios que aspiraban a este contrato que fue tramitado por la vía de urgencia.