Con una parte del vecindario y los comercios de la calle Mayor en pie de guerra, el Ayuntamiento de Ontinyent ha vuelto a aparcar la puesta en marcha de las nuevas zonas declaradas de prioridad residencial en el corazón del centro histórico.
Después de que la tregua de dos meses sin multas inicialmente concedida por el Ayuntamiento de Ontinyent haya llegado teóricamente a su fin, el regidor de Seguridad Ciudana, Pablo Úbeda, ha mantenido esta tarde una reunión informativa de más de dos horas de duración con los afectados con tal de escuchar sus sugerencias y tratar de llegar a puntos de consenso.
Finalmente, sin embargo, el consistorio ha decidido dejar la decisión en «stand by» para reflexionar sobre las propuestas y sugerencias trasladadas por los afectados. Úbeda indica que ha recibido opiniones a favor y en contra de la medida, pero se necesita «tiempo» para analizar detenidamente todo lo que se ha abordado en el encuentro.
Cámaras lector de matriculas en la calle Mayor de Ontinyent. / Perales Iborra
En cualquier caso, la activación del nuevo sistema no debería demorarse. El equipo de gobierno de Ontinyent se ha abierto a flexibilizar los criterios de acceso a las calles Gomis y Maians y quiere tomar una determinación definitiva antes de que acabe la semana. La voluntad de reducir el exceso de paso de vehículos motorizados y mejorar la calidad de vida en la calle Mayor, evitando el acceso indiscriminado de vehículos externos y reduciendo el tráfico, sigue plenamente vigente.
Los vecinos y comerciantes críticos con la medida no son partidarios de multar a los vehículos no autorizados que transitan por la zona. La semana pasada presentaron más de un millar de firmas en contra de la peatonalización y en los balcones de algunas viviendas incluso se han colgado en los últimos días pancartas con crespones negros, «en señal de duelo por la situación que viven las calles Gomis y Maians”. Los afectados advierten de que son pocos los negocios que sobreviven en la zona y temen que la peatonalización puede agravar el cierre de establecimientos.
Entre las propuestas alternativas formuladas por el vecindario figuraban cuestiones como levantar las restricciones los fines de semana, establecer un sentido único de circulación para ambas calles, la señalización de las aceras para separar más claramente la zona peatonal de la reservada a la circulación de vehículos, el control de los límites de velocidad por videovigilancia o la creación de plazas de aparcamiento para residentes y puntos de carga y descarga, junto con el acceso a la fibra óptica.
Aunque las zonas de prioridad residencial iban a ponerse en marcha inicialmente en el mes de abril en una decena de calles del casco antiguo, el ayuntamiento decidió poner el freno y fijó una moratoria sin multas durante un periodo de dos meses ante la inquietud y las dudas expuestas por los residentes.
Este lunes, la Policía Local de Ontinyent informó a los conductores y al vecindario de la inminente prohibición del tráfico de vehículos no autorizados por la calle Mayor. Tanto durante esta semana como la próxima, los agentes se limitarán a llevar a cabo acciones informativas, sin imponer todavía sanciones.
Los residentes todavía pueden presentar las instancias correspondientes en el registro de entrada del ayuntamiento para dar de alta las matrículas de determinados vehículos y que puedan circular por la zona de prioridad residencial. Aunque la previsión inicial era permitir un máximo de 4 matrículas por residente, el consistorio ha anunciado flexibilidad en los casos en los que sea necesario registrar alguna más, según indican fuentes municipal.
Entre el 1 de abril y el 12 de mayo, durante el periodo sin sanciones, las cámaras de vigilancia instaladas por el Ayuntamiento de Ontinyent en las calles Sant Antoni, Gomis i Maians captaron a un total de 28.759 vehículos no autorizados circulando por las nuevas zonas de Acceso Prioritario Residencial (APR), con picos de entre 1.251 y 1.283 coches diarios.
De las tres vías de acceso videovigiladas, la calle Gomis -un estrecho eje neurálgico de la ciudad que conecta la plaça de la Concepció con la calle Maians en el cruce con Delme- es, con mucha diferencia, la que soporta una mayor densidad de tráfico, al ser atravesada por 15.133 vehículos no registrados solo en el mes de abril (504 al día), el equivalente a casi el 70% de los desplazamientos sancionables contabilizados. El récord se batió el 4 de abril, con 799 coches que serían objeto de sanción, aunque hubo varias jornadas con cifras similares.
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