El olivar andaluz ocupa más de 1,6 millones de hectáreas, lo que representa casi el 15% de la superficie mundial y forma parte de un paisaje característico que va más allá de su rentabilidad económica. Esta, sin embargo, preocupa a la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), que alerta de los precios «ruinosos» que el aceite de oliva -una producción que lidera la comunidad a nivel internacional- está marcando en los últimos meses.
«Con la ley de la oferta y la demanda en la mano no entendemos los precios actuales», lamenta el secretario general de la organización en Andalucía, Jesús Cózar. En este sentido, reclama que «al menos» se puedan cubrir los costes. De hecho, teme que los precios puedan seguir bajando en los próximos meses, e incluso en la próxima campaña, que se prevé mejor que la actual aunque el olivar está sufriendo en algunas zonas plagas de prays y algodoncillo que pueden mermar la producción, así como la incidencia de las altas temperaturas.
Olivar tradicional
«Esta bajada de los precios no depende, por desgracia, de los productores, ojalá pudiésemos poner nosotros la cantidad», añade. En este sentido, apunta a que para obtener el denominado AOVE entran muchos distintos tipos de olivares, de los que en torno a un 30% son superintensivos, «explotaciones a las que sí les sale rentable vender a la baja», apunta, frente al olivar tradicional, que ocupa el 65% de esa superficie y a la que ahora mismo no le salen los números. «Con esta tónica es imposible mantener nuestras explotaciones de olivar tradicional», abunda.No descarta, de hecho, realizar protestas a las puertas de cooperativas «que facilitan esta caída del precio».
Sin embargo, la comercialización va a «velocidad de crucero», lo que ha hecho que se haya vendido ya el 70% del aceite de oliva producido en España esta campaña. «Y nosotros seguimos por debajo del umbral de rentabilidad en nuestras explotaciones. Con la comercialización de otras 135.000 toneladas, incluidas las importaciones, en el mes de mayo, según ha hecho público la AICA, hemos dejado de ingresar en nuestras cuentas de resultados otros 405 millones de euros por los precios actuales sólo en ese mes”, afirma Cózar.
Por debajo de Italia y Túnez
De ahí que UPA Andalucía insista en pedir prudencia al sector productor para defender un precio justo para los olivareros andaluces. “Menos síndrome de Estocolmo y menos miedo por vender pronto y más síndrome italiano, más valentía para vender por encima de los costes de producción en el olivar tradicional”, indica.
De hecho, según los datos de la semana 23 del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), el precio en origen del aceite de oliva virgen extra español está muy por debajo de las cotizaciones medias registradas en Italia (donde se paga casi tres veces más) y también es inferior a los últimos datos de los precios de Túnez.
«La rentabilidad del sector del olivar tiene que ir por la vía de darle valor a nuestro aceite y relacionarlo con la salud y sus beneficios, porque nos puede dar muchas alegrías y no solo buscar el abaratamiento de los costes únicamente, un aceite low cost, que no tiene las mismas garantías», reclama el secretario general de UPA-Andalucía.
