Ivet Playà ha sacudido las redes sociales esta semana tras confirmar públicamente que mantuvo una relación sentimental, íntima y sexual con el cantante Alejandro Sanz y que esta relación se acabó convirtiendo «en una terrible pesadilla«. Según ha revelado, la experiencia le ha dejado una profunda decepción sentimental, al descubrir actitudes del artista que, en sus palabras, “no eran normales”.
Después del revuelo inicial generado en redes, Ivet ha acudido al programa ‘De Viernes’ decidida a compartir su versión de los hechos. En el plató, la joven ha explicado que ha elegido este momento para hablar porque ahora se siente “preparada” para contar todo lo que vivió. “Le he puesto nombre y puesto orden a mi cabeza. Me he enamorado del personaje”, ha confesado.
Durante la entrevista, algunos colaboradores le han reprochado haber sido “muy ambigua” respecto a la cronología de la relación. Ante ello, Ivet ha precisado que sus declaraciones se centraban en una cuestión emocional y no legal: “Yo no hablé de delitos, hablé de sentimientos”, ha aclarado.
En este sentido, ha explicado que cuando mencionó los “límites morales” se refería a comportamientos concretos que experimentó en la relación: “La relación fue siendo mayor de edad y consentida. Después del vínculo sexual, empecé a ver a un Alejandro Sanz que no reconocía. Me di cuenta que el Alejandro que yo idolatraba, no existía. No fue de la noche a la mañana”, ha relatado.
Sombra de chantaje y dinero
Tras las primeras declaraciones de Ivet, Alejandro Sanz emitió un comunicado lamentando la ruptura emocional entre ambos y aseguró que Ivet le pidió en mayo invertir en un negocio familiar y tras revisarlo con sus asesores legales, Sanz le tramisitó su decisión: «Te dije que no«. «Ivet, yo tenía un recuerdo muy bonito de nosotros dos, personas adultas compartiendo su cariño, siendo libres. Qué pena que este sentimiento se haya roto ahora”, comenzó el comunicado del cantante.
“Siento que tu reacción sea esta, pero quiero que sepas que nunca he sido partícipe de estas prácticas y así seguiré toda mi vida. Te deseo encuentres pronto tu camino y felicidad”, culminó su mensaje.
Posteriormente, varios periodistas han señalado que la joven habría solicitado dinero para evitar contar su historia públicamente, e incluso habrían existido amenazas con divulgar vídeos íntimos del cantante. Playà, sin embargo, ha negado rotundamente estas acusaciones en el mismo programa. A su vez, ha admitido que hubo un encuentro para negociar una posible exclusiva con la revista Lecturas, pero ha asegurado que nunca chantajeó a Sanz ni le pidió dinero directamente: “Me lo ofreció él”, ha afirmado.
“Tuvo una actitud conmigo que no me gustó. No era que me diera un millón de euros, era su manera de reconocer que no hizo las cosas bien”, ha expresado, reiterando que su decepción con el cantante no fue inmediata, sino consecuencia de ciertos comportamientos tras sus primeros encuentros íntimos: “Eran poco éticos y poco humanos”, ha sentenciado.
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