Tumbar al Real Madrid es una misión casi imposible. Lo intentó hasta el final Unicaja, pero a los de Chus Mateo les bastó con estar unos pocos minutos por delante en el marcador para asaltar el Carpena (79-86)y sellar el pase a la final de la Liga Endesa. En ella se verá las caras con el Valencia Basket.[Narración y estadísticas del partido].
Fue un partido muy duro para el conjunto blanco. Unicaja maniató desde el triple gracias al gran acierto de Osetkowski, pero la gran labor del Madrid en el rebote y las actuaciones de Hezonja y Tavares acabaron decantando la balanza.
También fue vital la aparición de Llull. El base balear firmó dos triples importantes en la primera mitad y anotó otro en el último cuarto que puso +5 a los suyos en lo que fue un punto de inflexión en el partido.
A partir de ahí, Unicaja entró en un periodo de pánico que acabó siendo definitivo. Los de Ibon Navarro comenzaron a fallar tiros y, a pesar de que el Real Madrid también desaprovechó oportunidades de oro para precintar del todo el choque, los andaluces acabaron muriendo en la orilla.
Llegaron a estar a dos puntos a falta de un minuto. Sin embargo, una genialidad de Campazzo provocando el 2+1 con 40 segundos en el cronómetro fue determinante. Fintó a Osetkowski, se fue de él y firmó una bandeja que entró y le mandó además a la línea de personal. No falló y el Madrid ganó la batalla.
El Real Madrid está en una nueva final de Liga Endesa. Busca reeditar el título del año pasado y esta vez será Valencia Basket su rival a batir. Los valencianos viajan a velocidad de crucero y serán un hueso muy duro de roer.
Castigo desde el triple
Era ganar o morir. Lo sabía el Martín Carpena que desde el primer segundo apretó y alentó a los suyos en busca del triunfo. Y no pudo salir mejor al partido Unicaja de la mano de un Osetkowski que volvió a ser determinante desde el triple.
El alemán destrozó el perímetro con dos canastas desde más allá de siete metros en apenas dos minutos y cerró la primera mitad con un 4/4 de acierto tras la línea. Sin duda, el triple fue el principal bastión de los de Ibon Navarro para irse con ventaja al descanso.
Anotaron ocho en los primeros 20 minutos, superando así la marca obtenida en todo el segundo y tercer encuentro de la serie. Hicieron mucho daño a un Real Madrid que encontró su salvación en la pintura.
Y eso que a los de Chus Mateo les costó más de la cuenta. Algo estáticos en ataque, pasivos y con poca agresividad ante una férrea defensa malagueña, fueron encontrando alguna rendija de la mano de Mario Hezonja (12 puntos en la primera mitad) y de acciones vitales en momentos muy puntuales de Llull.
Ambos fueron el faro del Real Madrid en la primera mitad. Llegaron a ponerse 12 abajo, pero cerraron bien el segundo cuarto y acabaron recortando la desventaja hasta los cuatro puntos. Sufrieron mucho con las pérdidas, pero se hicieron fuertes en el rebote (capturaron seis más en la primera parte).
Mínimos detalles
Todo estaba por decidir y Tavares se cargó de faltas con su tercera personal cuando apenas habían corrido ocho segundos del reloj. Sin embargo, lejos de esconderse, el pívot del Real Madrid sacó su mejor versión y firmó siete puntos consecutivos que puso el choque en tablas.
Bruno Fernando puso a los blancos por primera vez delante en el marcador tras 26′ jugados, pero a Unicaja no le tembló el pulso y continuó con su ejercicio de intensidad. Así volvió a encender a su pabellón, ganando duelos físicos y manteniendo la efectividad en sus lanzamientos.
Campazzo, durante el partido contra Unicaja.
EFE
Se inició entonces un intercambio de golpes que duró hasta los últimos minutos del cuarto final. Concretamente a falta de cinco, cuando un triple de Llull supuso el principio del fin de Unicaja. Los de Ibon Navarro no se rindieron, pero no fueron capaces de lograr la machada.
Llegaron a estar a dos puntos a falta de un minuto, pero llegó una penetración sensacional de Campazzo que forzó un 2+1 y precintó definitivamente el triunfo. El Real Madrid está una nueva final y tendrá la oportunidad de cerrar el año con un título. Deberá ganar a Valencia Basket.