El consejero delegado de Prensa Ibérica, Aitor Moll, ha clausurado el II Foro Económico y Social del Mediterráneo celebrado este año en Málaga y ha saludado ya a la ciudad de Barcelona, que será la encargada de acoger la tercera edición de este encuentro estratégico impulsado por Prensa Ibérica y Fundación «la Caixa».
Moll ha destacado el «extraordinario potencial del área mediterránea», una idea que ha enlazado todas y cada una de las intervenciones de autoridades, empresarios y especialistas que han participado en las dos jornadas de trabajo que ha acogido el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga (Fycma) entre el 17 y el 18 de junio.
«Hemos asistido a una conversación fructífera que debe permitirnos avanzar en soluciones para los desafíos más importantes de los pueblos y territorios que comparten litoral en este mar», ha afirmado Aitor Moll.
El consejero delegado ha defendido que los «grandes retos» responden a «necesidades, carencias y problemas» aunque con un buen enfoque, ha recalcado, estos se pueden convertir en «oportunidades».
Entre esos desafíos se encuentra la necesidad de «acelerar y culminar infraestructuras clave» como es el caso del Corredor Mediterráneo, o la imperiosa obligación de poner solución a la «escasez de recuros hídricos, agravada por el aumento de la población, el turismo y la agricultura intensiva», lo que lleva a plantear una revisión de los planes hidrológicos así como «un esfuerzo inversor para acometer las grandes obras aún pendientes».
Moll ha puesto el foco en el hecho de que el Mediterráneo es «uno de los mares más afectados por el cambio climático», con incrementos de temperatura, del nivel del mar y «con fenómenos extremos como la DANA que sufrió Valencia el pasado mes de octubre», ha insistido.
«Proteger el Mediterráneo es proteger nuestro futuro, algo que conecta con la economía azul, que se está revelando como un nuevo motor económico para el arco mediterráneo español», ha enfatizado Aitor Moll, que ha apuntado a esta vía como una fórmula para atraer inversión tecnológica, innovación y empleo, así como un impulso para la regeneración del hábitat marino.
El Mediterráneo es también uno de los «puntos más calientes» del fenómeno migratorio y así lo ha subrayado el consejero delegado, que hacía referencia al balance de ACNUR, que cifra entre 100.000 y 200.000 migrantes los que «cruzan cada año el mar Mediterráneo, arriesgando sus vidas para llegar a Europa».
Esto exige «avanzar en medidas urgentes de control fronterizo» y en una cooperación internacional «con obligado respeto a los derechos humanos».
A su juicio, hay tres principios claves por los que Occidente debe apostar y son la solidaridad, la educación inclusiva y la integración laboral. «Solo así lograremos desmontar la injusta imagen negativa que tiene la sociedad sobre los inmigrantes».
Sobre los efectos y las consecuencias del turismo, otro de los puntos cardinales de los diálogos y mesas de debate, Moll ha insistido en que se debe establecer como «prioridad» la búsqueda de un modelo que «se adapte a los límites ecológicos de cada destino y que no excluya a los residentes de los beneficios que genera la actividad turística».
Ha enfatizado que es vital luchar contra «los desequilibrios que el turismo provoca» en algunos territorios, como es la falta de vivienda asequible, la precariedad laboral o la «desconfianza entre residentes y visitantes».
No han sido los únicos asuntos que se han puesto sobre la mesa. El consejero delegado ha querido destacar también las interesantes reflexiones que se han aportado sobre energía renovable, el problema de la vivienda, la inversión en defensa o la protección el patrimonio histórico-cultural.
«Ha llegado el momento de pensar y trabajar juntos, de comprendernos y de remar en la misma dirección», ha invitado el consejero delegado de Prensa Ibérica, al tiempo que ha agradecido el apoyo a Fundación «la Caixa» y al conjunto de patrocinadores, entidades e instituciones públicas que se han sumado al Foro Económico y Social del Mediterráneo, que en 2026 visitará la Ciudad Condal. «Les esperamos».