La temporada 1968-69 sigue siendo, a día de hoy, la mejor campaña liguera en la historia de la UD Las Palmas. El equipo terminó segundo, por detrás del Real Madrid, firmando una clasificación histórica que aún no ha sido igualada.
Más allá de ese subcampeonato, hay un dato que llama especialmente la atención: solo 14 jugadores participaron a lo largo de toda la temporada. En un contexto muy distinto al actual —con plantillas cortas, sin rotaciones tácticas y con una normativa que solo permitía una sustitución por partido y únicamente en caso de lesión—, la UD compitió con un bloque muy definido y apenas sufrió variaciones jornada tras jornada.
Plantilla corta y norma restrictiva
El equipo estaba dirigido por Luis Molowny y formado por nombres como Tonono, Guedes o Germán Dévora, entre otros. La mayoría eran canarios y habituales en el once titular. Conviene recordar que, en aquella época, los cambios tácticos no estaban permitidos: la única sustitución posible requería una lesión confirmada y autorización arbitral.
La Unión Deportiva cerró la temporada con 38 puntos, tras cosechar 15 victorias, 8 empates y 7 derrotas en 30 jornadas. Entonces, las victorias valían dos puntos y los empates uno. El Real Madrid se proclamó campeón con 47 puntos, lo que dejó a la UD a nueve unidades del liderato.
La gesta de los 14
Aunque en las primeras décadas de la Liga pudo haber casos similares, disputar una temporada entera utilizando solo 14 jugadores sigue siendo uno de los registros más llamativos y difíciles de repetir en la historia del campeonato.
Oregui, Martín Marrero, Castellano, Tonono, Justo Gilberto, Guedes, Niz, Germán Dévora, Gilberto I, León, José Juan, Aparicio, José Luis y Lo fueron los 14 jugadores que protagonizaron aquella campaña irrepetible. Un subcampeonato logrado con lo justo, imposible en el fútbol moderno, y grabado para siempre en la historia de la UD Las Palmas.