El magistrado Enrique Arnaldo ha respondido con otra carta la que el presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, le envió la semana pasada para rechazar su petición de esperar a que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) se pronunciara sobre la amnistía, después de que se conociera que Europa había fijado para el 15 de julio las dos primeras vistas, en las que que estudiará: la remitida por el Tribunal de Cuentas en relación con el 1-O y la acción exterior del Govern, y la de la Audiencia Nacional por los CDR a los que les fueron intervenidos sustancias susceptibles de convertirse en explosivos.
En la misiva, a la que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, Arnaldo critica que Conde-Pumpido haya decidido ampliar a toda la última semana de junio el pleno en el que se deliberará y dictará la sentencia del Constitucional sobre la amnistía. El magistrado conservador considera que al Constitucional le «falta una auténtica deliberación», porque «no es la pura sucesión de intervenciones que se cruzan, pero no se encuentran». En su opinión, «la deliberación jurisdiccional es una puesta en común dirigida a enriquecer la propuesta inicial con razones, ideas y argumentos, para intentar alcanzar una posición común. Pero la deliberación jurisdiccional no es la simple antesala de la votación, como parece entenderse, cuando se establece un calendario o agenda célere».