El PSOE Aragón mantiene la cautela tras la comparecencia de Pedro Sánchez. El presidente del Gobierno y líder nacional de los socialistas pasó este lunes la primera pantalla del complicado videojuego que le presentan los presuntos delitos de José Luis Ábalos y Santos Cerdán. Sánchez puso la tirita y salió a la ofensiva contra PP y Vox, mostrando el ataque como la mejor defensa y poniendo el 5 de julio, fecha del Comité federal que se celebrará en Madrid, como el día en rojo para rubricar su enésimo cambio de dirección en su trayectoria política.
Las bases socialistas en Aragón vieron con buenos ojos la aparición del presidente, más vehemente que al conocer la implicación de Cerdán en conversación con Ábalos y Koldo García, pero el silencio en los pisos altos del PSOE Aragón sigue patente. Pilar Alegría hablará hoy, en un acto al que asiste en calidad de ministra de Educación en el colegio Corona de Aragón de Zaragoza, y atenderá a los medios de comunicación por primera vez después de que se publicara el informe de la UCO que afecta a su ya excompañero de partido, Santos Cerdán.
Este lunes no hubo valoración aragonesa de la intervención de Sánchez en la Ejecutiva federal, y eso que las dos mujeres más importantes del partido en la comunidad participaron en ella. Tanto Pilar Alegría, secretaria general del PSOE Aragón, ministra de Educación y portavoz del Gobierno de España, como Manuela Berges, secretaria de Organización en la comunidad y alcaldesa de Pedrola, participaron en las cinco horas que duró la Ejecutiva federal más complicada en años para el PSOE. Fuentes cercanas a la dirección del partido en la comunidad se limitaron a continuar el mensaje de Sánchez desde Ferraz y se mostraron cercanos a lo expresado por el presidente desde el atril.
La cúpula del PSOE Aragón fía su mensaje a la jornada de hoy. Alegría vuelve a hablar en la comunidad tras silencio en el territorio ante los medios de comunicación. Participó en un acto educativo en El Burgo de Ebro, pero sin admitir preguntas de los periodistas. Hoy celebra el fin de curso escolar en el Corona de Aragón de Zaragoza y sí hablará para la prensa.
El caso Santos Cerdán, la implicación de los dos Alfonsos aragoneses en las conversaciones de los investigados por la UCO o su valoración de la sentencia de las pinturas murales de Sijena, tan exigida por el presidente aragonés Jorge Azcón, serán núcleo de un mensaje que promete marcar los próximos pasos del partido en la comunidad y confirmar la alineación total con el discurso de Ferraz, de facto el mismo que el de Moncloa.
Las bases ven con buenos ojos la continuidad con la Ejecutiva federal, pero sí reclaman en las últimas horas una mayor exposición de Alegría, para que «se note el mensaje» que se quiere mandar también en Aragón. Los mensajes en los grupos de militantes son claros: apoyar al partido, pero exigir «más limpieza». Los socialistas quieren que el próximo Comité federal sirva para marcar un antes y un después y que «no se produzcan más casos como estos que aparecen en la prensa». Sánchez ha cometido dos grandes errores con Ábalos y Cerdán y saben que un tercero sería fatal para el presidente y para toda la organización.
Aunque, como hiciera Sánchez en su intervención, los militantes aragoneses defienden que el PSOE es «el partido nacional más transparente», dan por hecho que los miembros de la Ejecutiva y el Comité federal reclamarán a la dirección más controles internos para atajar cualquier atisbo de corrupción y evitar la repetición de este tipo de acciones.
Los socios de coalición reclaman contundencia
La reacción del PSOE tuvo el rostro de Pedro Sánchez y el silencio orgánico del PSOE en Aragón, pero no así de sus socios. Tanto Izquierda Unida como Chunta Aragonesista han elevado un discurso de condena total de la corrupción y han pedido a los socialistas mano dura con la polémica que ahoga al Gobierno desde hace días.
En palabras de Álvaro Sanz, coordinador de IU en Aragón y portavoz en las Cortes, el PSOE no puede «naturalizar la corrupción como un mal endémico» y ha reclamado cambios legales para tener un mayor control democrático del gasto público. Este caso no puede entenderse como un hecho puntual o aislado, sino como una expresión más de un problema estructural: un modelo político y económico basado en la connivencia entre altos cargos públicos y grandes corporaciones que se enriquecen a costa de lo común», denuncian desde Izquierda Unida.
Sanz ha insistido en que «cambiar de nombres o de partido no basta» y ha rechazado que «los servicios públicos sigan siendo una fuente de negocio para unos pocos a costa de todos». «Ante la corrupción, tolerancia cero, caiga quien caiga», ha sentenciado el
El diputado aragonesista en el Congreso, Jorge Pueyo, ha denunciado que para CHA las palabras del presidente han sido «decepcionantes e insuficientes». El miembro de Chunta Aragonesista, dentro del Grupo Parlamentario Sumar, ha criticado en sus redes sociales que «la política exige firmeza contra corruptos y corruptores». La líder de la plataforma, Yolanda Díaz, ha comparecido en rueda de prensa y también ha puesto el foco en las empresas presuntamente implicadas en la trama.
El golpe de Pueyo también ha tenido efecto regional, con mención directa al caso de Alfonso Gómez Gámez, número dos en el Ayuntamiento de Zaragoza por los socialistas. «Cosas como mantener al portavoz adjunto del PSOE en el Ayto de Zaragoza es no haber entendido nada«, ha sentenciado el aragonesista en su comunicado. Pueyo dará este martes una rueda de prensa, en la que insistirá en las nuevas relaciones con el PSOE y volverá a enfatizar las críticas de este breve comunicado.
Un Comité federal con más intereses para Aragón
La decisión fundamental del Comité federal socialistas del próximo 5 de julio es el nombre del nuevo secretario de Organización del PSOE. Una elección clave para Pedro Sánchez, su entorno y su partido, después de dos responsables organizativos (José Luis Ábalos y Santos Cerdán) presuntamente implicados en tramas de corrupción. En clave aragonesa, el cónclave socialista servirá para dirimir dos de los tres puestos que la comunidad tiene en Ferraz.
El primero de ellos es el de vocal que conservará Pilar Alegría, secretaria general del PSOE Aragón y ministra de Educación y portavoz del Gobierno de España. Su mano derecha orgánica en la comunidad, Manuela Berges, es ahora mismo secretaria de Políticas Sociales, Mayores y Movimientos Sociales. El PSOE tiene un cupo, un porcentaje, de miembros que pueden compaginar cargos en la Ejecutiva federal y en la regional, donde es secretaria de Organización. No es descartable que Berges mantenga ambos puestos tras la reorganización interna que Sánchez pretende realizar en tres semanas.
El puesto aragonés que no tiene dueño es el del Comité federal. Una elección que fue el principio del final del conflicto entre sanchistas y lambanistas en la comunidad. Teresa Ladrero, ya secretaria general del PSOE Zaragoza, rechazó la responsabilidad por orden de Javier Lambán y Juan Antonio Sánchez Quero. Desde entonces, el espacio está vacante, aunque Ferraz asegura que el puesto lo asumirá un socialista aragonés.