La Virgen del Pino sube a Teror acompañada de miles de fieles tras su salida este domingo de la Catedral de Canarias, donde ha permanecido desde el 31 de mayo. A las seis de la mañana se abrían las puertas del templo para iniciar una subida histórica que devolverá a la Patrona de Gran Canaria a su santuario en Teror.
La imagen ha cruzado varios barrios de la ciudad en su peregrinación, desde el caso antiguo, Las Rehoyas, Miller Bajo, El Polvorín, Los Tarahales, Siete Palmas y Tamaraceite.
La subida ha estado llena de momentos de gran emoción para los vecinos de la capital grancanaria. En el Hiperdino de Miller Bajo los voladores recibieron el trono y en Los Tarahales una gran petalada proveniente de un edificio conmovió a los asistentes. En Tamaraceite, la iglesia de San Antonio Abad acogió el desfile con pétalos, confeti y música.
La LII bajada de la Virgen del Pino ha protagonizado momentos históricos como la visita a Telde y Vecindario. Este es un acontecimiento tradicional que se desarrolla desde el siglo XVII, en aquel momento se celebró para rogar a María ante la falta de lluvias. En esta ocasión, bajo el lema ‘Camino de esperanza’, los creyentes han podido trasladar a la Virgen sus peticiones personales y colectivas.