Gabi Fernández seguirá en el banquillo la próxima temporada tras llegar en la anterior al equipo zaragocista. El dato no supone algo realmente novedoso en este club, porque en los últimos tiempos se ha convertido casi en norma en el Real Zaragoza, tanto en la última etapa de Agapito Iglesias en la entidad, que ya lo instauró como algo habitual, como desde el descenso para que el entrenador madrileño sea el décimo en 16 años que se ajusta a ese patrón antes descrito, teniendo en cuenta que la misma historia dice que la continuidad en el puesto no ha supuesto por lo general buenas noticias.
De los nueve anteriores a Gabi, solo Víctor Fernández en la 19-20, JIM en la 21-22, sin que pudieran subir, y Manolo Jiménez en la 12-13, en el curso del descenso, terminaron la siguiente temporada, pero no lograron el objetivo. Mientras, José Aurelio Gay, en la 10-11, Aguirre, en la 11-12, Víctor Muñoz, en la 13-14, Popovic, en la 15-16, Escribá, en la 23-24, y el propio Fernández en esta pasada temporada no fueron capaces de acabar su segundo curso tras lograr el objetivo en el anterior. Gabi tiene, pues, la oportunidad de cambiar esa llamativa tendencia.
La lista la inaugura José Aurelio Gay, que llegó tras 14 jornadas en la 09-10, después del cese de Marcelino García Toral, que firmó el que es el último ascenso a Primera del Zaragoza. El entrenador madrileño, con una revolución de siete fichajes en enero, logró la permanencia, pero en la siguiente temporada fue víctima, junto con Nayim, de los desmanes de Agapito Iglesias para solo durar 11 jornadas en el puesto en la 10-11 y que Javier Aguirre tomara el relevo para sellar la continuidad en la élite, esta vez sin apenas refuerzos invernales pero igual de agónica, rubricada en el Ciutat de Valencia ante el Levante con dos goles de Gabi.
Manolo Jiménez da instrucciones en un partido del Zaragoza en la 12-13. / El Periódico de Aragón
Tampoco se libró Aguirre de los engaños del máximo accionista en el verano de 2011, en esa ocasión con la fallida alianza con Jorge Mendes, y el proyecto de la 11-12 con la continuidad del mexicano nació con muy mal aspecto para que al llegar al parón navideño hubiera de nuevo relevo, con el Zaragoza colista destacado, y con Manolo Jiménez conquistando una salvación casi milagrosa en esa temporada, en 22 jornadas que casi han pasado a la leyenda del fútbol español por el tamaño de la remontada, lo que le valió para continuar en el cargo, aunque ya nada fuera igual. El Zaragoza aún mantuvo el espíritu del entrenador de Arahal en la primera vuelta, pero se cayó por completo después para acabar bajando a Segunda en 2013, categoría de la que no ha vuelto.
Todavía estuvo un año más Agapito Iglesias en la propiedad y Víctor Muñoz tomó el relevo de Paco Herrera tras 30 jornadas en la 13-14 para lograr que el equipo no se fuera a Segunda B. Estuvo en ese verano de 2014 a punto de desaparecer, pero la Fundación compró la mayoría accionarial y en un cambio global absoluto con la nueva propiedad decidieron mantener al entrenador zaragozano en el puesto, aunque una mala trayectoria tras un buen inicio y las desavenencias con los nuevos dueños pusieron a Víctor Muñoz en la calle tras 14 citas para que Ranko Popovic tomara el testigo.
No era entonces una misión de salvación, puesto que el Zaragoza rozaba la promoción, pero el serbio lo mantuvo en la zona alta para llegar a los playoffs y quedarse muy cerca de subir, más que nunca en esta eterna etapa en Segunda, a solo siete minutos en el estadio de Gran Canaria ante Las Palmas. Popovic, que había rubricado un contrato por año y medio, hasta junio de 2016, se mantuvo en el puesto y en la 15-16, con el equipo empezando arriba y saliendo de la promoción en la 18º cita liguera, tras caer ante el Nástic, hizo las maletas, junto al entonces director deportivo, Ángel Martín González, por cierto.

JIM, en un partido ante Las Palmas en la 21-22. / ÁNGEL DE CASTRO
Luis Milla, en el verano de 2016, Natxo González, en el de 2017 e Imanol Idiakez en el de 2018, empezaron el curso sin tener la maleta del año anterior, como en 2013 hizo Paco Herrera, pero fue un espejismo porque Víctor Fernández arribó en esa 18-19 con 24 jornadas por delante y con peligro de descenso para sellar una salvación que le valió continuar, aunque fue el propio técnico el que lo decidió, no sin suspense, y en la 19-20 terminó el curso, de excelso nivel hasta marzo y el parón por el covid, con el billete a la élite en la mano, y de desastrosa recta final de 11 partidos después para caer en la promoción de ascenso.
Rubén Baraja empezó la 20-21, una Liga completa de estadios vacíos y a la que el Zaragoza llegó penúltimo tras 18 jornadas sin que la llegada de Iván Martínez hubiera tenido efecto para que cogiera el timón en ese momento JIM, firmando por temporada y media, y lograra la primera de las salvaciones de estos últimos años. El entrenador alicantino se quedó en el puesto, cumpliendo lo firmado, y completó un curso 21-22 irregular, donde no se sufrió en demasía por bajar pero se estuvo muy lejos de cualquier idea de ascenso.

Víctor Fernández, en su último partido como entrenador, ante el Oviedo en diciembre pasado. / EFE
Con la nueva propiedad, Real Z LLC, llegó en el verano de 2022 Juan Carlos Carcedo, el sexto técnico en estos 16 años que ha empezado la pretemporada como novedad, pero solo aguantó tres meses en el cargo para que a principios de noviembre Fran Escribá le sustituyera en el banquillo, firmando también por esa temporada 22-23 y la siguiente.
El míster valenciano logró la salvación en ese curso y un gran arranque del siguiente para que después llegara una tremenda caída que le llevó al cese tras 16 citas y que Julio Velázquez fuera su sustituto temporal antes de que Víctor Fernández, de nuevo, recibiera la llamada para en las 12 últimas jornadas lograr la salvación. Eso propició que siguiera, con plenos poderes para confeccionar la plantilla además, para comenzar este último curso con buen pie y naufragar después y acabar dimitiendo tras 20 partidos. Ramírez fue su sucesor y acabó por llegar Gabi, que aspira a acabar con esta maldición de los relevos.