El Mundial de Clubes se presenta desde la lógica de Europa contra el resto del planeta. En ningún plan entra que los equipos del Viejo Continente no copen la mayoría de los puestos de octavos, a pesar de que son los que llegan con un peor carga de minutos en la cita. De eso quieren aprovecharse los ‘outsiders’ que representan lo mejor de sus territorios, como el Inter de Miami y el Al Ahly, que protagonizarán un partido inaugural que será el primer examen de la FIFA a un torneo que es una incógnita.
Entrenado por el gallego José Riveiro
Al Ahly puede sonar a club comparsa en medio de PSG, City o Real Madrid, pero su palmarés es el más rico del mundo. Ningún otro equipo tiene más títulos en sus vitrinas: 155 títulos oficiales, entre los que destacan 12 Liga de Campeones de la Confederación Africana de Fútbol. En los últimos tiempos, se ha sumado al proyecto José Riveiro (Vigo, 1977) , entrenador con amplia experiencia en el fútbol africano gracias a su papel en el Orlando Pirates.
José Riveiro, entrenador español del Al Ahly de Egipto. / GIORGIO VIERA / EFE
«Lo podríamos comparar a lo que es el Real Madrid en España. Sin duda es el equipo más seguido del país. Me atrevería a decir que de mucha gente de varios países árabes. Incluso personas que trabajan en otros clubes tienen pegatinas en sus coches del Al Ahly«, cuenta a Prensa Ibérica Daniel Giménez, técnico que conoce bien el fútbol de Egipto, donde militó en los últimos años, como miembro de la estructura del Future FC.
«El hecho de tener un enorme número de aficionados, que exigen resultados en cada partido, hace que vestir la camiseta de Al Ahly exija mucho más que cualquier otro equipo. Es la que más pesa. Tengo la sensación de que los jugadores del Al Ahly tienen ese ‘espíritu luchador’ o compromiso que hace que, aunque vayan perdiendo un encuentro, son capaces de remontar en los dos últimos minutos», destaca Giménez.
Grupo con Oporto y Palmeiras
A priori, el ‘rey de África’ es el que peor lo tiene en un grupo en el que también están Oporto y Palmeiras, pero en su escudo está la esperanza de su continente. Una responsabilidad similar a la que tienen las selecciones cuando compiten en el Mundial. «Estoy convencido de que Al Ahly como club, y concretamente José Riveiro como entrenador, competirán a un gran nivel. Nunca se puede subestimar a este equipo (aunque venga de competir en África tiene jugadores de un nivel espectacular) y su técnico tiene una gran experiencia. Sabe de buena mano lo que significa ser entrenador de un club así», asegura el conocedor del fútbol de Egipto.

Los jugadores del Inter de Miami celebran un gol. / EFE
Riveiro apenas ha tenido unas diez sesiones para preparar una competición intensa, que no admite margen de error. A su favor está su gran experiencia en torneos cortos y el buen desempeño que tiene en eliminatorias como la que Daniel Giménez vivió cuando era entrenador del Al Hilal, el club más ganador de Sudán. Un choque de trenes con un ambiente increíble.
«Dos días antes del partido de Champions, miles de aficionados se presentaron en los 15 minutos finales del entrenamiento cantando y animando como si ya estuviesen en el partido. Fue una experiencia increíble. El estadio estaba lleno y no dejaron de animar durante los 90 minutos. Pese a perder 0-1, los seguidores nos alentaron hasta el último segundo e incluso después del encuentro mostraron su gratitud por el esfuerzo que se hizo durante el duelo», recuerda el entrenador español, quien destaca la atmósfera diferente que Al Ahly consigue cuando juega como local.
El jugador a seguir: Omar Kamal
«En África hay muchísimo jugador con un talento increíble y hay equipos de un nivel muy alto, no solo Al Ahly, pero las infraestructuras o condiciones de algunos países a veces dificultan las cosas para el desarrollo en general del continente. Aunque todos sabemos del gran nivel que hay con selecciones africanas en los mundiales o en los Juegos.Si ves algunos partidos de la Copa de África o Arab Cup, puedes ver como compiten de bien«, advierte, un análisis que tendrá en cuenta el Inter de Miami para no vivir ante su gente un debut aciago.

Omar Kamal, a la izquierda, en un partido con Egipto. / EFE
El jugador más peligroso del Al Ahly es Omar Kamal, quien precisamente salió del Future FC al poco de llegar Giménez a Egipto. «Hace todo distinto a los demás -o mejor-. No por su técnica o su físico, que es bastante normal, por lo que verdaderamente destaca es por su profesionalidad y seriedad. Podía ser el jugador más ‘simpático’ del club, pero cuando pisa la hierba para comenzar el entrenamiento es el más serio y comprometido. Su actitud y su manera de entender el juego es lo que le hace estar a otro nivel. Así es como fichó por al Ahly y está siendo un jugador súper importante desde que llegó al club en enero de 2024″, opina sobre el jugador de banda derecha.
Para Egipto también es una reválida, después de que su selección, pese a contar con grandes jugadores como Salah o Marmoush, no haya estado al nivel esperado. «Me parecía como una gran potencia mundial en el fútbol, el mejor país de África en lo que a fútbol se refiere, pero después de dos temporadas aquí, he visto muchas cosas o vivido muchas cosas que me hacen replantear ese pensamiento. Quizás Egipto podría estar a otro nivel si todos los clubes, y sobre todo la federación, fueran más organizados y profesionales«, sentencia Giménez. Retos que convergen en el camino de un Al Ahly que espera ser el invitado incómodo al festín de Messi.