El Magdeburgo es un equipo que no le ha puesto las cosas fáciles al Barça nunca. El conjunto alemán le ha ganado al Barcelona en múltiples ocasiones. En 2023, los alemanes vencieron a los azulgranas en semifinales del Final Four dónde quedaron 40-39. Ese año, los de Bennet Wiegert se alzaron con el título de campeones europeos.
Además, también se impusieron en la Super Globe en los dos primeros años de Carlos Ortega en el club. La primera vez fue en octubre de 2021, los germanos doblegaron al Barça de paliza (28-33) siendo muy superior en casi todo el partido, y un año después, aunque esta vez por los pelos, los alemanes ganaron en la prórroga.
¿Pero… qué es lo que hace que el Magdeburgo sea un gran rival?
El juego del Magdeburgo se enfoca principalmente en el choque de uno contra uno. Esto es lo que hace ser tan imprescindible al central, Gisli Thorgeir Kristjansson. Gracias a su altura de 1,91 metros, el islandés, es capaz de topar continuamente. Por este motivo, sus lesiones de hombro son recurrentes, ya que esta estrategia les funciona muy bien. Kristjansson, es un animal en la pista y los choques son clave para liderar a su compatriota, el finalizador, Ómar Ingi Magnússon. Al lateral derecho le resulta más difícil sacar ventaja cuando no está Gisli, ya que cuando le salen dos defensores, Magnússon la dobla después de chocar sin que sea falta en ataque, siempre rozando el límite y el siguiente recibe la pelota en superioridad.
Otra de las estrellas del equipo es el jugador Felix Claar. Él es el central titular de la selección sueca y un jugador impresionante, destaca por su velocidad y estrategia. Este año no fue al mundial debido a una lesión que le mantuvo fuera de las pistas durante bastante tiempo, pero ahora que ya está recuperado, su participación en la semifinal es clave para el equipo. El sueco lleva meses preparando el encuentro.
En el caso que no salga Kristjansson, es probable que en su lugar esté Albin Lagergren. El lateral es otro sueco que le ha hecho mucho daño al Barça, y tienen un estilo de juego muy parecido al de Gisli, aunque no va tanto al choque ya que, es más pequeño (1,86 m). Lagergren es muy buen fintador. Se parece mucho al esloveno Blaz Janc. Otro de los laterales que lo está haciendo bien sin Gisli es Philipp Weber. Por dentro, está el extraordinario pivote Magnus Saugstrup, uno de los candidatos que el Barça estudió cuando se fue Ludovic Fábregas, pero finalmente no pudo ser.
En la portería está Sergey Hernández, futuro guardameta del Barça que llegará en 2026. Como segundo bajo los palos, está Nikola Portner. El suizo es hijo de un jugador mítico del Barça serbio, de la época del ‘Dream Team’, Zlatko Portner. Nikola, que irá como portero suplente, fue acusado de dopaje en 2024 y estuvo un tiempo sin jugar.
Por último, una de las piezas más importantes del equipo: el entrenador y exjugador, Bennet Wiegert. El alemán le ha devuelto la ilusión al Magdeburgo, que desde su llegada ha dotado al equipo de numerosos premios, que llevaba mucho tiempo sin ganar nada. Ha sumado grandes títulos en el palmarés del conjunto alemán: dos títulos de la Bundesliga (2022 y 2024), un título de la EHF European League (2021), un título de la Champions League (2023) y varios títulos de la DHB Pokal (2016, 2024). Además, ha ganado la IHF Super Globe en tres ocasiones (2021, 2022, 2023).
LA GRAN INCÓGNITA
La gran incógnita sigue. Aún no se sabe nada sobre la participación de Gisli Kristjansson que ha viajado a Colonia con el equipo, un jugador que, como ya hemos comentado, sería decisivo en el juego. Pregunta quese le comentó hace unos días en una entrevista en SPORT, al extremo izquierdo del Barça, Aitor Ariño. «Nosotros pensamos que Gisli va a jugar como sea. Ellos tienen grandes jugadores y todos van a dar el máximo. Hablamos mucho de la defensa, porque juegan mucho el uno contra uno, se meten a seis metros, sueltan el balón antes de la falta y, si estamos muy juntitos, hacemos faltas y cortamos ese juego, tendremos una gran parte ganada», comentaba el jugador.
El juego del Magdeburgo se caracteriza por su enfoque en el uno contra uno, sus ataques posicionales y su letalidad en las transiciones rápidas. Este fin de semana sabremos si el Barça será capaz de vencer a su ‘bestia negra’.