Múltiples peticiones de “perdón” a la ciudadanía por haber confiado en Santos Cerdán, promesas de “ejemplaridad”, sentimientos de “indignación”, unos cuantos cambios en la Ejecutiva que aún están por concretar, una auditoría externa para analizar las cuentas del PSOE y un doble anuncio que afecta al Gobierno: ni elecciones anticipadas, ni cambios en el Consejo de Ministros. Pedro Sánchez ha comparecido este jueves por la tarde en la sede del PSOE para dar cuenta de la forzada dimisión de su hasta ahora secretario de Organización, a quien la UCO acusa a través de un extenso informe de estar implicado en el cobro de comisiones, junto a José Luis Ábalos, a cambio de adjudicaciones de obras públicas. Pero el líder del PSOE, durante una rueda de prensa que ha durado algo menos de 25 minutos, ha evitado concretar en qué consiste su “responsabilidad” en todo este escándalo.
“Quiero pedir perdón porque hasta esta misma mañana estaba convencido de la integridad de Santos Cerdán. Esta mañana hemos podido conocer la integridad del informe [de la UCO]. Han aparecido esos indicios. Son graves, muy graves. Por eso le he pedido su dimisión como secretario de Organización y su renuncia al acta de diputado. Y por eso de nuevo quiero pedir disculpas. El PSOE y yo como secretario general no debimos confiar en él. En este mundo desgraciadamente no existe la corrupción cero, pero sí debe existir la tolerancia cero cuando esta se produce”, ha señalado Sánchez con cara de circunstancias y tono de voz bajo.
Hacía siete años que el líder socialista no comparecía en la sala de prensa de la madrileña calle de Ferraz, donde se encuentra la sede del PSOE. Aquella vez fue para anunciar la moción de censura a Mariano Rajoy que le condujo a la Moncloa. Ahora Sánchez se encuentra en su peor momento político desde que alcanzó el Gobierno, con los socios criticando su gestión del ‘caso Cerdán’, que viene a sumarse a los escándalos de José Luis Ábalos y los que afectan a su mujer y a su hermano, y el PP comparando al Ejecutivo con una “mafia” y pidiendo elecciones.
No las va a haber, ha señalado Sánchez, que ha vuelto a insistir en que los próximos comicios generales, a los que él quiere presentarse, serán en 2027. Tampoco contempla, pese a la presión que ejercen numerosos mandos socialistas en este sentido, hacer cambios en el Gobierno. Pero sí en la Ejecutiva. Sánchez ha anunciado una “reestructuración” de la dirección del partido, que se conocerá en el comité federal del próximo 5 de julio en Sevilla.