El acusado de matar a un hombre en su chabola de es Carnatge y prenderle fuego en enero de 2022 ha negado hoy, en la última sesión del juicio, su implicación en el crimen. Ricardo A.M. ha asegurado que no tuvo nada que ver en la muerte de Melanio Valverde y ha acusado a los investigadores del grupo de Homicidios de la Policía Nacional de presionarle “muy fuerte” para que “confesara algo que no había hecho”.
El sospechoso ha justificado así que cuando fue detenido un año después del asesinato admitiera a la Policía que aquella noche estaba en la zona del crimen con su coche. Hoy lo ha negado. “Durante todos los trayectos desde que me detuvieron me insistieron en que mi coche había sido captado por una cámara en un lugar donde se había producido un asesinato y que tenían más información por el posicionamiento de mi teléfono móvil y sabían que estaba ahí. Insistieron una y otra vez como preparándome para que dijera algo que no había hecho”, ha asegurado Ricardo A.M. “Era una trampa claramente. No tenía nada que esconder, por eso declaré. Me insistieron una y otra vez que mi coche estaba ahí, que una cámara me había captado. ¿Qué les iba a decir? Fue una presión muy fuerte, continua, y dijera lo que dijera encauzaban las preguntas para que dijera que había estado allí y confesara algo que no había hecho sin haber estado allí”, ha asegurado.
El hombre ha afirmado que el vehículo que aparece en las imágenes aportadas por la Policía, que no le mostraron cuando fue arrestado, no es el Dacia Sandero que él utilizaba de forma habitual en aquel momento. “Dije que estaba allí porque me lo dijeron ellos. Decían que iban a ayudarme, que solo tenía que declarar para aclarar unas cosas. Como un imbécil me lo creí”, ha apostillado.
Ricardo A.M. ha explicado que la última vez que vio a Melanio Valverde fue “una semana o dos antes” del asesinato. Sobre su relación con la víctima, ha explicado que lo conoció unos meses antes y que solía ir a visitarle a la chabola «una o dos veces por semana».
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