¿Por qué conviene tomar más vitamina C en verano? En nuestras células, los electrones viven felices en pareja, pero cuando se toma el sol sin protección, es capaz de destrozar esta bonita unión, romper la pareja y formar radicales libres, unas moléculas inestables que están dispuestas a hacer lo que sea para volver a estar en pareja, robando electrones de otras moléculas. Por ejemplo, de la sangre, de la piel… Si esto ocurre, pueden aparecer enfermedades, entre ellas el cáncer.
¿Por qué conviene tomar alimentos con vitamina C especialmente en verano? Porque son muy generosos, y pueden ceder un electrón a los radicales libres haciendo que vuelvan a vivir felices en pareja y evitando el daño celular.
¿Dónde podemos encontrar vitamina C? En el pimiento, tomate, brócoli, coles de bruselas, repollo, berros, canónicos, espinacas, espárragos verdes, rábanos… y, por supuesto, perejil, que se puede usar como un suplemento natural.
Y dentro de las frutas, está claro que las naranjas y los limones son la estrella, pero también el kiwi, las fresas, frambuesas, arándanos o mango, entre muchas otras, van cargados de vitamina C.