Tras meses de silencio desde la conferencia conjunta entre el comisionado de la NBA, Adam Silver, y el secretario general de la FIBA, Andreas Zagklis, el ambicioso proyecto de una NBA Europa vuelve a tomar protagonismo en la agenda del baloncesto internacional.
Un objetivo en el calendario
Durante la rueda de prensa previa a las Finales de la NBA y más recientemente en un evento de NBA Cares celebrado en Oklahoma City, Silver confirmó que las conversaciones sobre expandir la liga al continente europeo han resurgido, aunque aclaró que el proyecto aún se encuentra en una fase inicial: “Estamos en una etapa muy temprana del proceso. Es un poco difícil establecer un plazo específico ahora. Por lo tanto, estamos al menos a un par de años de su lanzamiento. Sería una tarea enorme”, señaló el comisionado, sugiriendo que los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028 podrían marcar un punto de referencia para este proyecto internacional.
Una buena planificación
Silver también hizo hincapié en la importancia de un enfoque colaborativo: “Si bien queremos avanzar a un ritmo pausado, también queremos asegurarnos de consultar con todas las partes interesadas pertinentes, reuniéndonos con la Euroliga, sus equipos, jugadores europeos, medios de comunicación y socios de marketing. Por lo tanto, hay mucho trabajo por hacer”.
Una oportunidad de mercado
Uno de los argumentos centrales del comisionado para impulsar esta expansión es el potencial del mercado europeo: “Seguimos creyendo que hay una enorme cantidad de aficionados al baloncesto desatendidos en Europa y que existe una gran oportunidad para tener otra liga al estilo de la NBA”.
De acuerdo con un artículo publicado por la NBA, ciudades como Londres, Manchester, Roma y Múnich figuran entre las candidatas más probables para albergar equipos en esta futura liga. Además, Silver abrió la puerta a la creación de nuevas franquicias desde cero y mencionó que varias organizaciones (como pueden ser PSG o Manchester City) ya han expresado su interés en formar parte del proyecto y operar en estos importantes mercados europeos.
Aunque el camino hacia una NBA Europa aún es largo, el renovado impulso del liderazgo de la liga señala que esta visión, largamente considerada como utópica, podría estar más cerca de convertirse en realidad.