La Región de Murcia tendrá presupuestos para el año 2025. Lo anunció el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, este jueves tras reunirse con el líder regional de Vox, José Ángel Antelo, en la ronda de contactos con los representantes de las formaciones políticas con representación en la Asamblea para abordar el techo de gasto y las cuentas del presente ejercicio, que llegan con medio año de retraso.
Desde el Partido Popular y Vox llevan semanas asegurando que ya existía un preacuerdo entre ambos para sacar adelante este proyecto de ley, que los de Abascal validarán en la Cámara autonómica después de que el PP haya aceptado sus condiciones, que pasan por endurecer la política migratoria.
Las claves del pacto
De hecho, una de las principales medidas exigidas por Antelo es el cierre del centro de protección de menores Rosa Peñas para después del verano, como anunció este mismo día La Opinión. Pero hay más exigencias referidas a esta materia. Los de Abascal confían que se ponga en marcha un sistema similar al de Aragón por el cual se pueda determinar la edad de los migrantes que llegan a la Región. También esperan que se retiren las subvenciones a todas aquellas oenegés que, según ellos, colaboran con la inmigración ilegal, el tráfico ilegal de personas, la trata de blancas o la explotación infantil.
El Partido Popular se compromete a continuar con las acciones impulsadas por el Gobierno de coalición que echó a andar tras las elecciones de 2023. Esto pasa por impulsar el Centro Integral de Respuesta a Emergencias y Seguridad (Cires), firmar un nuevo Acuerdo Marco en el Consorcio de Extinción de Incendios y Salvamento, avanzar en los trámites necesarios para ampliar el tranvía de Murcia hacia otros municipios cercanos como Alcantarilla y Molina de Segura, e implantar un centro de formación para la industria del mueble de Yecla.
Otra de las condiciones que lograron sacar del Partido Popular los últimos meses tiene que ver con la reforma de la Ley de Participación Institucional para promover el método de concurrencia competitiva en la concesión de subvenciones, frente al modelo de subvención directa. Además, los nuevos presupuestos continúan con la senda de los anteriores, que ya redujeron un 25% las aportaciones dirigidas a sindicatos UGT y Comisiones Obreras y a la patronal murciana Croem.
En materia de tributos, son varios los intentos de los de Abascal en la Asamblea para reducir el tipo impositivo del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, así como el Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados.