El jugador del Real Madrid Raúl Asencio se enfrenta a una segunda petición de pena de cuatro años de cárcel por la difusión del vídeo sexual grabado en un apartamento del sur de Gran Canaria, en este caso a raíz del escrito presentado por la abogada de la víctima mayor de edad. Comparte a grandes rasgos, como era previsible, el relato de hechos de la otra acusación y le atribuye la comisión de delitos de pornografía infantil y revelación de secretos.
Se trata del denominado caso Canteranos, que también investiga a los entonces jugadores del Real Madrid C Ferrán Ruiz, Juan Rodríguez y Andrés García. La diferencia principal radica en que estos tres investigados participaron en el encuentro sexual con las dos víctimas, que entonces tenían 16 y 18 años de edad, y se les atribuye otro delito de revelación de secretos en la modalidad de grabación de vídeos.
Junto a la petición de cárcel, los jugadores se enfrentan a pagar una responsabilidad civil que las acusaciones cifran en 58.000 euros de indemnización -27.000 por lesiones temporales, 21.000 por secuelas y estrés postraumático y 10.000 por el daño moral-, junto a una multa de 20 meses con una cuota diaria de 10 euros. La justificación de estas cuantías se basa en la doble victimización que habrían sufrido por la grabación sin su consentimiento en un club de Amadores en 2023 y, en el caso de Asencio, por su condición mediática y la gran repercusión que tuvo el caso en los medios de comunicación.
Grabación no consentida
Los hechos objeto de acusación se remontan al 15 de junio de 2023, cuando tuvo lugar el encuentro sexual, consentido, al sur de la Isla y tres de los jugadores decidieron grabar a las jóvenes. Esta grabación, sostienen los escritos, no fue consentida y, cuando las víctimas vieron lo que estaba ocurriendo les pidieron que borraran las imágenes y así creyeron que había ocurrido.
No fue hasta meses después cuando decubrieron a través de terceras personas que el vídeo presuntamente se estaba divulgando. Además, un testigo apuntó directamente a Asencio y señaló que estaba con él cuando recibió en su móvil, supuestamente tras perdirlo, el vídeo sexual.
El jugador se pronunció por primera vez sobre estos hechos en mayo, tras conocerse la decisión del juez de dar por concluida la investigación. En concreto, aseguró en un comunicado difundido en sus redes sociales que no grabó ni envió «ninguna imagen o vídeo íntimo con las dos mujeres implicadas», haciendo un llamamiento a su vez a que «debe seguir prevaleciendo la presunción de inocencia».