El grupo municipal Hacemos Córdoba ha lamentado que la ciudad comience un nuevo mes sin contar con el espectáculo nocturno del Alcázar de los Reyes Cristianos, un producto turístico de primer nivel que lleva cinco años sin funcionar y que, durante su etapa activa, contribuyó de forma decisiva a mejorar las cifras de pernoctaciones y a dinamizar el sector turístico local.
Desde Hacemos Córdoba se vuelve a calificar de “nefasto, impresentable y cargado de mentiras” el proceso que ha seguido el gobierno municipal en relación a este espectáculo. La ausencia continuada del mismo «demuestra, una vez más, que se ha engañado” a la ciudadanía con planteamientos “falsos” por parte del alcalde y su equipo, quienes prometieron que en el mes de mayo el espectáculo volvería a estar en funcionamiento. Sin embargo, se ha perdido el mes con mayor número de visitantes, mayo, sin que la ciudad haya podido ofrecer uno de sus atractivos más potentes para incentivar las estancias y el consumo local.
Hacemos Córdoba recuerda que ya desde el inicio de la licitación alertó de diversas irregularidades en el procedimiento y advirtió que no se contaba con los permisos necesarios por parte de la Junta de Andalucía para las actuaciones que se iban a llevar a cabo. Las advertencias realizadas se han confirmado con el paso del tiempo: el espectáculo sigue sin reanudarse y Córdoba continúa sin uno de sus productos turísticos, «dando una imagen lamentable” en lo que a gestión turística se refiere, según Hacemos.
Desde el grupo municipal se considera que «ha llegado el momento de asumir responsabilidades políticas por este nuevo fracaso, Córdoba no puede seguir a la deriva en materia turística, como lo viene haciendo desde que el Partido Popular accedió al gobierno municipal».
Hacemos Córdoba insiste en la necesidad de repensar el modelo turístico de la ciudad, que debe pasar por la recuperación de productos turísticos de calidad y por una gestión pública eficaz. En este sentido, se reitera la propuesta de crear un patronato público que asuma la gestión directa tanto del Alcázar como de Caballerizas Reales, garantizando una planificación “profesional, transparente y orientada al interés general» porque “Córdoba no puede permitirse más promesas incumplidas ni más errores de gestión. Es hora de tomar decisiones valientes que permitan a la ciudad recuperar el rumbo y ofrecer una oferta turística a la altura de su patrimonio y su historia”.