Una investigación realizada en China y otros estudios recientes sugieren que las patologías del sueño, como el insomnio, el trastorno del movimiento periódico de las extremidades y la apnea del sueño podrían estar relacionados con la pérdida auditiva.
Un equipo de investigadores de la Universidad Médica de la Fuerza Aérea, en China, ha identificado mecanismos biológicos comunes entre los trastornos del sueño y la pérdida auditiva. Este hallazgo, que se resume en un estudio publicado en la revista Neuroscience, sugiere que condiciones como el insomnio, el síndrome de movimientos periódicos de las piernas y la apnea del sueño podrían compartir procesos fisiológicos con el deterioro auditivo, abriendo nuevas posibilidades para tratamientos integrados.
Aunque tradicionalmente se han estudiado por separado, los trastornos del sueño y la pérdida auditiva podrían estar interrelacionados. Algunas investigaciones previas indicaban que la pérdida auditiva puede dificultar el sueño, mientras que otros estudios sugerían que los problemas de sueño podrían afectar la salud auditiva. Sin embargo, el nuevo estudio se centró en identificar los mecanismos biológicos subyacentes que podrían ser comunes a ambas condiciones.
Neurotransmisores en común
Según publica Medical Xpress, los investigadores encontraron que ciertas alteraciones en neurotransmisores, inflamación crónica y estrés oxidativo podrían desempeñar roles clave tanto en los trastornos del sueño como en la pérdida auditiva.
Por ejemplo, desequilibrios en neurotransmisores como GABA y glutamato pueden afectar la calidad del sueño y la función auditiva. Además, la inflamación sistémica y el estrés oxidativo pueden dañar tanto las células cerebrales responsables del sueño como las células ciliadas del oído interno.
La revisión realizada por el equipo de investigadores a cargo del nuevo estudio sugiere que las diferentes etapas del sueño pueden influir en la percepción auditiva de distintas maneras. Por ejemplo, la capacidad de las personas para procesar sonidos es claramente más intensa durante el sueño sin movimientos oculares rápidos (NREM), en comparación con el sueño con movimientos oculares rápidos (REM).
Referencia
Echoes in the night: How sleep quality influences auditory health. Peng Zhang et al. Neuroscience (2025). DOI:https://doi.org/10.1016/j.neuroscience.2025.04.039
Nuevos tratamientos
Este descubrimiento tiene importantes implicaciones para la medicina preventiva y el tratamiento de ambas condiciones. Comprender los mecanismos compartidos podría conducir al desarrollo de terapias que aborden simultáneamente los trastornos del sueño y la pérdida auditiva. Además, podría mejorar las estrategias de diagnóstico temprano, permitiendo intervenciones más efectivas y personalizadas.
El estudio destaca la importancia de considerar la interconexión entre diferentes sistemas del cuerpo humano y abordar investigaciones interdisciplinarias. Al identificar mecanismos biológicos comunes entre los trastornos del sueño y la pérdida auditiva, se abre la puerta a nuevas estrategias terapéuticas que podrían mejorar notoriamente la calidad de vida de los pacientes afectados por ambas condiciones.