El proceso de adjudicación de plazas de Formación Sanitaria Especializada (FSE) que finalizó este jueves, ha llegado con sorpresa. Por primera vez en los últimos años, se han adjudicado la totalidad de las plazas ofertadas en la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria (MFyC), que en convocatorias anteriores había registrado un número significativo de vacantes. «Es la especialidad más bonita del mundo», justifica la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) que, asegura, «frente al discurso alarmista sobre las plazas vacantes, los datos muestran una realidad bien distinta: miles de aspirantes manifiestan su interés» por ejercer en los centros de salud.
El Ministerio de Sanidad se congratula de que «ha completado» con éxito la asignación de las 11.943 plazas de FSE ofertadas, sin que hayan quedado vacantes en ninguna de las titulaciones convocadas. El procedimiento se inició el 23 de abril con la adjudicación de plazas a las personas aspirantes de farmacia, psicología, química, física y biología. El 24 de abril comenzó la adjudicación para la titulación de enfermería, y desde el 5 de mayo hasta el 28 de mayo se desarrollaron los actos correspondientes a la titulación de medicina (MIR). Así, los nuevos residentes deberán incorporarse entre el 5 y el 6 de junio en los centros asignados.
Tendencia preocupante
Si se habla de Medicina de Familia, recuerda el Ministerio, en el curso 2022/2023 quedaron sin adjudicar 131 plazas, cifra que aumentó a 246 en la convocatoria 2023/2024. «Esta tendencia preocupante», subraya el departamento que dirige Mónica García, ha sido revertida en la actual convocatoria 2024/2025, donde se han adjudicado las 9.007 plazas ofertadas para Medicina, incluyendo las 2.508 correspondientes a esta especialidad.
Los médicos de familia llevaban días haciendo campaña para que los residentes eligieran la especialidad. «Ni es la Cenicienta, ni es el patito feo», defendían hace apenas unos días, cuando esas plazas todavía tardaban en agotarse. Ahora, la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria saca pecho: «Deseamos felicitar a todas y todos los residentes que a partir de este junio comenzarán el proceso de especialización», dicen en un comunicado.
Mayor número plazas
Recuerdan que la suya es la especialidad con mayor número de plazas ofertadas y elegidas. Con una oferta que multiplica por 18 la media del resto, que cuadruplica las plazas de Pediatría (segunda en el ranking con 518 plazas) y quintuplica las de Anestesiología y Medicina Interna, «se reafirma como la columna vertebral de la atención sanitaria en nuestro país«, enfatiza la semFYC.
La situación que vive la elección de especialidad en España no es única. En todo el mundo, en países con un perfil similar al nuestro, se están produciendo procesos similares, abundan. Tanto en Países Bajos como en Canadá se han aumentado las plazas de formación en residencias especializadas en Medicina Familiar y Comunitaria ante las futuras necesidades del sistema.
La sociedad científica reflexiona sobre lo sucedido: durante todo el proceso de elección, incluso durante los primeros días, la especialidad se ha situado «sin duda, en la mitad superior de la tabla de más elegidas y, a medida que algunas especialidades agotaban sus plazas disponibles, la Medicina Familiar y Comunitaria se situaba entre las diez más escogidas. Por tanto, pedimos, un año más, que lectura no se reduzca a un simple recuento y, en lugar de eso, se pongan los datos en su contexto real».
«Un punto de inflexión»
Y, además, llama la atención sobre distintos aspectos. Este año, en el que no ha habido plazas vacantes en la especialidad por primera vez en mucho tiempo, debe marcar «un punto de inflexión», apuntan. Pero, además, a la semFYC le preocupan «especialmente» dos elementos estructurales sobre las implicaciones futuras: por una parte, «el desajuste entre la oferta y la demanda, que se aleja de las verdaderas necesidades del SNS; y por otra, la falta de medidas adecuadas para responder a la tasa de reemplazo de todas las especialidades en los próximos años».
Recuerdan que el SNS «deberá dar respuesta, a medio y largo plazo, al aumento de patologías crónicas y al envejecimiento de una población frágil y con multimorbilidad. La respuesta a esta coyuntura pasa por un enfoque generalista y no por una visión hiperespecializada».
Entre las peticiones, una estrategia nacional que visibilice la importancia para el sistema de la Medicina Familiar y Comunitaria y el impulso de la especialidad en la Universidad
Entre sus peticiones, una estrategia nacional que visibilice la importancia para el sistema de la Medicina Familiar y Comunitaria; el impulso de la especialidad en la Universidad; la implementación urgente de una estrategia de gestión que garantice el relevo generacional ante las jubilaciones previstas o la puesta en marcha de un plan estratégico específico para las plazas de difícil cobertura, tanto para las plazas de especialista del SNS como para las de residente.
