El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha advertido de que la solución de dos Estados está «muy cerca» de ser «imposible» debido a la guerra en Gaza y a la política de asentamientos que está llevando a cabo Israel en Cisjordania, animando una vez más a aquellos países que aún no lo hayan hecho a reconocer el Estado palestino.
Albares ha lanzado este mensaje durante un acto celebrado en Casa Árabe con motivo del reconocimiento de Palestina por parte de España, una decisión que ha defendido que «era, sin duda, una decisión necesaria». «Era también una decisión justa y, a la luz de toda la tragedia que hemos visto desde ese 28 de mayo, hace un año, era una decisión urgente», ha sostenido.
Por eso, ha añadido, «yo sigo animando al resto de estados del planeta que no lo han hecho todavía, que se sumen a ese movimiento» y reconozcan el Estado palestino, como hicieron hace un año España, Noruega, Irlanda y Eslovenia, al tiempo que se ha felicitado de que Malta haya anunciado que lo hará próximamente.
«Si la situación sobre el terreno sigue así en Gaza y en Cisjordania, estamos muy cerca de que la solución de dos Estados sea por la vía de los hechos, por la vía de la guerra, por la vía de la colonización ilegal, imposible«, ha prevenido el jefe de la diplomacia.
Sobre la mesa, ha subrayado Albares, lleva tiempo la solución de dos Estados, Israel y Palestina, que «convivan en paz y en seguridad mutua». Por lo tanto, ha esgrimido, «no se trata ahora de reiniciar, mucho menos de reinventar, el proceso. El proceso ya ocurrió, todos lo sabemos».
Implementación efectiva de los dos Estados
«Ahora de lo que se trata es de concluirlo y de asegurar la implementación efectiva de la solución de dos estados. Y esa es una respuesta que es la única viable. No hay alternativa. No hay otro camino. No hay otra vía para la paz», ha recalcado Albares.
Así las cosas, el ministro se ha referido a la conferencia de alto nivel sobre la implementación de la solución de dos Estados que se celebrará el próximo 17 de junio en la ONU auspiciada por Francia y Arabia Saudí. «Por supuesto España estará en ella, será un momento crucial», ha aseverado.
Esta cita, ha sostenido, «tiene que ser un gran momento en torno al reconocimiento del Estado de Palestina y un clamor para que Palestina pase a ser un miembro de pleno derecho de las Naciones Unidas». «La implementación (de la solución de dos Estados) tiene que ser rápida. Tiene que estar sujeta a un plazo. La implementación no puede ser un concepto. La vida de millones de palestinos está literalmente en juego», ha advertido.
Ofrecer compromisos concretos
En este sentido, ha apostado por «ofrecer compromisos concretos el próximo 17 de junio en Nueva York». «El reconocimiento es uno de ellos. Tenemos que adaptarnos a las circunstancias hasta que termine esta guerra y tenemos que ofrecer soluciones que sean inclusivas, que puedan acoger a todas las partes», ha afirmado.
Y, desde luego, ha agregado, «tenemos que tener una posición firme y autónoma para que los acontecimientos sobre el terreno no hagan descarrilar nuestras propuestas de paz». En este punto, Albares ha querido aclarar una vez más que «nuestra postura, clara, firme y que va a ser sostenida tanto tiempo como sea necesario, no es una postura dirigida contra nadie».
«Por supuesto, no está dirigida contra Israel» dado que «la solución de dos estados incluye un Estado de Israel con quien queremos seguir dialogando» y que «sabemos que vamos a necesitar a Israel sentado en la mesa para aplicar esa solución de dos estados».
Pero al mismo tiempo, ha añadido Albares, hay que continuar «exigiendo también responsabilidad a aquellos que la tienen«, también en relación con «esta guerra bárbara».
De ahí, ha recordado, su petición a imponer un embargo sobre la venta de armas a Israel y también a imponer sanciones «contra todos aquellos que quieran obstaculizar la paz e imposibilitar definitivamente la solución de dos estados», así como su apuesta por la suspensión del Acuerdo de Asociación de la UE con Israel en base al artículo 2 relativo al respeto de los Derechos Humanos.