El PP ha aprobado este miércoles junto a Vox los Presupuestos de la Generalitat de 2025. Un logro que el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, se anota como estaba previsto y que le afianza la legislatura pese a que su futuro político hasta 2027 está en el aire.
La luz verde ha llegado pasadas las 23.00 horas con 53 votos a favor y los 46 votos en contra del PSPV y Compromís en lo que todos dan por hecho que serán las últimas cuentas de la legislatura.
Éstas han sido recibidas entre aplausos, en pie, de los diputados del PP y Vox, mientras PSPV y Compromís han gritado ‘Mazón, dimisión’ y han exhibido carteles con este lema.
La frenética sesión ha arrancado alrededor de las 10 de la mañana. Los populares querían que el debate y la votación de los presupuestos se produjera en un único día.
La imagen ha sido algo muy inusual en el Parlamento autonómico, donde las jornadas de aprobación de las cuentas suelen ser largos, pero no al nivel de este miércoles.
El PP quería evitar que la sesión se alargara al 29 de mayo, el señalado día en el que se cumplen siete meses de la fatídica dana.
Los presupuestos que han obtenido luz verde tienen un importante componente político. En primer lugar porque se trata de los de la dana.
Las conocidas como cuentas de la reconstrucción tras la tragedia del pasado octubre incluyen 2.364 millones de fondos dirigidos a las medidas de recuperación.
Éstas contienen, además, un déficit del 1,15%, doce veces superior al autorizado por el Gobierno para las comunidades autónomas (que para este año es del 0,1%).
En su momento, desde la Conselleria de Hacienda que dirige Ruth Merino explican que decidieron basarse en la nueva regla fiscal europea.
Motivo por el que contemplan un techo de gasto del 3,2% sobre la ejecución presupuestaria del ejercicio, el límite máximo al que podían subirlo en 2025.
Estabilidad en la incertidumbre
En segundo lugar, los presupuestos le otorgan al presidente de la Generalitat estabilidad en un momento de incertidumbre política sobre su futuro.
Como ha publicado EL ESPAÑOL, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, pretende tomar una decisión al respecto tras el congreso nacional del partido.
Mazón, sin embargo, ha querido dejar claro precisamente este miércoles que va a continuar al frente de la Generalitat pese a estos movimientos en declaraciones a los medios.
Hemiciclo de Les Corts, este miércoles durante el debate de presupuestos. José Cuéllar / Corts
Los presupuestos le permiten, desde luego, alargar la legislatura hasta que así lo decida él mismo, bien sea en un escenario de salida pactada o de resistencia.
A ello se añade que ha contado con el apoyo de Vox. Un partido que sería necesario si el PP quisiera colocar a otro presidente.
Fue Mazón quien negoció en primera persona el proyecto de presupuestos con sus exsocios y desde Presidencia se han pilotado todas las conversaciones con ellos respecto a las enmiendas.
El presidente de la Generalitat buscaba un logro de gestión y las cuentas son el que mejor puede tener a nivel de discurso aunque dentro del PP se asuma la debilidad de su posición.
Desde su entorno hacen hincapié en que Mazón ha conseguido aprobar unas cuentas mientras el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ni siquiera ha presentado unas.
Además, es el primero de los líderes autonómicos populares que ha podido sacarlas adelante después de la salida de Vox de los Ejecutivos.
Con esta aprobación, comienza indudablemente una nueva fase de la legislatura, que llega a su ecuador el próximo julio.
De un lado, los meses que quedan de 2025 deberán resolver el futuro de Mazón. Habrá que comprobar si Feijóo realmente da un paso adelante para un hipotético relevo y cómo se desarrollarán todos los acontecimientos.
El PP valenciano considera que no se puede dar otro escenario que el de una salida pactada en la que se acuerde todo, desde los plazos a la fórmula.
La organización autonómica es partidaria de un congreso en 2026 en el que elegir al candidato de 2027 en una transición calmada.
De otro lado, los populares también tendrán que seguir definiendo su relación con Vox a la hora de sacar adelante las leyes más importantes.
Lo deseable sería un alejamiento ideológico, pero la realidad es que continúan necesitando sus votos, cada vez más caros y que comportan más cesiones, como ha ocurrido en presupuestos.
La situación política de Mazón ha sobrevolado durante todo el pleno y ha sido usada por la oposición, que ha definido las cuentas como las de la «salvación» del presidente de la Generalitat o, incluso, las de la «prórroga».
