El idilio de Jessica Bouzas con las sorpresas en las primeras rondas de los Grand Slams han pasado a otro nivel este lunes en París tras apalizar a la estadounidense Emma Navarro, número 9 del ranking WTA, por 6-0 y 6-1 en menos de una hora de partido.
Fue un vendaval de principio a fin de la tenista gallega que dejó sin respuesta a la semifinalista del pasado US Open y la defensora de los octavos aquí en París, que solo pudo celebrar un único juego en todo el partido.
Una pequeña alegría que llegó tras más de 50 minutos de partido disputados y que se tomó de manera irónica la americana, celebrando con el puño levantado tras la doble falta de Bouzas que dejó sin doble rosco el marcador final.
Pese a salvar el ridículo total, Navarro no pudo alargar más el partido y se quedó con un único juego en su marcador final, despidiéndose de una manera sorprendente del segundo Grand Slam de la temporada a manos de una Jessica Bouzas que abre las esperanzas del tenis español en el cuadro femenino.
La española topará ahora con la vencedora del partido entre la francesa Parry y la estadounidense Montgomery el próximo jueves en segunda ronda.
«Estoy muy contenta. Ha sido un partido increíble. Con este nivel y la confianza todo es posible. Ha sido genial» explicó una feliz Jessica Bouzas sobre la Suzanne Lenglen que aplaudía asombrada tras la gran actuación de la española.