El Milan evitó este sábado el desastre ante el Monza (2-0), colista de la Serie A al que ganó con dos goles a balón parado en una amarga despedida en San Siro, templo italiano casi vacío tras una temporada desastrosa y solo preocupado por mandar un claro mensaje a la directiva estadounidense y a Gerry Cardinale, propietario del club: ‘Go Home’.
Después de que unas 4.000 personas se presentaran esta misma mañana en la sede social del club para manifestarse de manera pacífica contra RedBird Capital, el fondo estadounidense propiedad del club, la protesta continuó en San Siro, donde la afición radical, la organizada, formó el mensaje ‘Go Home’ con los únicos asistentes de la zona, en el fondo sur, dejando el resto de asientos vacíos.
Ni Ibrahimovic se salva
Es el mensaje claro y más visual que pudo llevar a cabo tras una temporada desastrosa del club, eliminado antes de lo esperado en Champions Legaue, sin opciones de jugar la próxima campaña en Europa, derrotado en la final de la Coppa Italia, con el filial descendido a Serie D y con la única excepción de la Supercoppa de Italia ganada en enero.
No solo hubo cánticos contra Cardinale y la propiedad estadounidense, pues Zlatan Ibrahimovic, Giorgio Furlani y Paolo Scaroni, que forman parte de la directiva, también fueron objeto de críticas, en sintonía al resto de una temporada negra en la historia del club ‘rossonero’. Al único al que cantaron valorando fue a Paolo Maldini, exdirector deportivo al que el club despidió en 2023, momento en el que el Milan empezó a caer.
Dos goles a balón parado
Tampoco el equipo de Sergio Conceiçao en el verde se libró de las críticas, también culpable del desastre colectivo milanista. A punto estuvo, de hecho, de no aprovechar una oportunidad de acabar ganando un partido fácil, ante el colista, descendido desde hace semanas. Pocos jugadores salva la afición este año. Reijnders, Maignan, Jiméenez, Gabbia… Poco más.
Fue este último el que se encargó de esquivar el desastre en un partido encaminado al empate sin goles, anodino como todos los del equipo ‘rossonero’ esta temporada. Lo hizo con un remate de cabeza en un saque de esquina en el minuto 64. Fue la primera jugada a balón parado que sirvió al Milan para desbloquear el duelo.
MILAN
20
monza
Milan: Maignan; Tomori, Gabbia, Pavlovic; Musah (Chukwueze, m.46), Loftus-Cheek, Reijnders, Bartesaghi (Jiménez (m.61); Pulisic (Florenzi, m.86), Joao Félix (Fofana, m.80); Jovic (Camarda, m.46).
Monza: Pizzignacco (Mazza, m.83); Pereira, Caldirola (Izzo, m.79), Carboni; Birindelli, Bianco, Akpa Akpro, Kyriakopoulos; Ciurria (Sensi, m.70), Caprari (Castrovilli, m.70) y Keita Balde (Petagna, m.79).
Goles: 1-0, m.64: Gabbia; 2-0, m.74: Joao Félix
Árbitro: Daniele Rutella. Mostró tarjeta amarilla a Bianco (m.51) por parte del Monza
Incidencias: encuentro correspondiente a la trigésimo octava jornada de la Serie A, disputado en el Estadio Giuseppe Meazza (San Siro) de Milán (norte)
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La segunda fue de Joao Félix, autor de un lanzamiento de falta poco después que sentenció el duelo. Fue su despedida personal de San Siro, donde llegó para brillar y donde todo apunta a que no seguirá tras otra decepción. Antes, el luso se topó con el larguero con un gran remate de cabeza.
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Pero no fueron los goles lo que animaron ligeramente a San Siro. Fue la entrada del canterano de oro, Francesco Camarda, en el que el Milan pone muchas de sus esperanzas en el futuro. No consiguió marcar, pero su insistencia y su calidad volvieron a dejar claro que tiene algo especial. La temporada que viene tendrá más protagonismo.
El Milan, por fin, puso fin a su pésima temporada. Levantó la Supercoppa italiana, un único recuerdo positivo que no salva el desastre. La victoria no acalló los pitos al final del choque.
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