El Jimbee Cartagena cerró la fase regular con una exhibición ofensiva ante el Burela (6-2), en un partido marcado por la diferencia de aspiraciones entre ambos equipos. Mientras los cartageneros afinaban la maquinaria antes del inicio del playoff por el título, el conjunto gallego, ha terminado perdiendo la categoría.
El equipo dirigido por Duda aumentó sus buenas sensaciones y tuvo mucho gol. En un encuentro que sirvió para reconectar con la esencia más competitiva, el Jimbee mostró el respeto que merece el deporte y al rival, sin caer en la tentación de la relajación. Fue una actuación seria, comprometida y directa, como exige este tramo final de temporada donde cada detalle cuenta.
Motta fue el gran protagonista con un ‘hat-trick’ que subraya su momento de forma y su importancia en los esquemas ofensivos del equipo. El conjunto cartagenero completó su goleada con otros tres tantos, cerrando la fase regular con una imagen sólida y una contundente declaración de intenciones: están listos para lo que viene.
Y lo que viene es mayúsculo.
La lucha por reeditar el título arranca esta semana con un emparejamiento de alto voltaje: Jimbee Cartagena contra Inter Movistar. Mismo rival, mismo escenario que el año pasado, cuando comenzó el inolvidable camino hacia el primer campeonato de liga.
En una temporada marcada por el foco internacional —el equipo alcanzó el tercer puesto en la Champions League—, la ambición doméstica vuelve ahora a ocupar el centro del escenario. El vestuario lo tiene claro: hay que poner los cinco sentidos en esta nueva batalla. No será fácil repetir la gesta, pero con autoexigencia y personalidad van a buscarlo.
El camino hacia el título ya está trazado. El Jimbee ya está en marcha y ahora buscará mostrar su mejor versión en cuantos duelos vengan por delante.
