La Mostra de Vins de Terres dels Alforins celebraba el pasado sábado su 12ª edición registrando de nuevo una espectacular respuesta del público local, del llegado de todos los rincones de la Comunitat Valenciana, e incluso de los visitantes de las autonomías vecinas, batiendo las cifras de 2024. La Associació de Viticultors i Productors de Terres dels Alforins afrontaba esta edición con el objetivo y el reto de gestionar la masiva y creciente afluencia de público que las últimas ediciones estaban registrando, especialmente la de 2024 en Fontanars, que prácticamente dobló las cifras registradas hasta esa fecha. Para eso las bodegas de Terres dels Alforins han hecho especial hincapié en medidas que mejorasen la experiencia de los miles de visitantes, que han vuelto a superar los 10.000. Digitalizar los accesos con un sistema de lector de QR que han reducido al máximo los tiempos de espera y repartir el evento por más calles de la localidad de Moixent, han hecho que el evento recupere su carácter mágico, elegante y tranquilo, que es la esencia con el que los bodegueros decidieron ponerlo en marcha.
La jornada arrancó en una mañana soleada que apuntaba ya a unas altas temperaturas para todo el día. La apertura corrió a cargo de una comitiva en la que el presidente de Terres dels Alforins, Rosendo Biosca, estuvo acompañado por Ángel Marhuenda, director general de la PAC de la conselleria de agricultura; Pedro Cuesta, diputado de Turismo de la Diputació de València; Guillermo Jorques, alcalde de Moixent y Eduardo Tejedor, jefe de zona de Cajamar. Juntos recorrieron los expositores de las bodegas asistentes, la gastronomía y los gremios artesanos que llenaron de color y sabor las calles de Moixent.
Paco Calatayud fue homenajeado en su pueblo. / Urban
El recorrido terminó en el epicentro de La Mostra, El Paraor de Moixent, donde la Asociación de Viticultors i Productors de Terres dels Alforins rindió habitual homenaje a un personaje destacado del pueblo anfitrión. En este caso el homenaje recayó en el moixentí Paco Calatayud por su trabajo y ahínco en la defensa del territorio. Lluís Vila ejerció de maestro de ceremonias con un discurso mágico en el que puso en valor la grandeza del legado que nos trasladan nuestros mayores. Sabiduría que no está en los libros y que, sin embargo, pasan de generación en generación y son garantía de futuro para las generaciones venideras. También tomaron la palabra dos grandes amigos de Paco Calatayud, los veteranos periodistas Vicente Lladró y Pérez Puche. Hubo tiempo para la sorpresa, pues la televisiva Álex Blanquer, muy querida por Paco, fue la encarga de entregarle la placa de homenaje.
Los vinos de las bodegas de Terres dels Alforins estuvieron bien acompañados durante toda la jornada por la gastronomía local y la música en directo. Mal Romans, por la mañana, y Lulú y Los Tigretones por la tarde, hicieron bailar a los miles de visitantes que llenaron las calles de Moixent en un ambiente espectacular. “Hemos superado ligeramente las cifras de 2024, una edición en la que las expectativas se desbordaron generando algunas incomodidades que queríamos solventar este año y estamos muy satisfechos porque las mejoras implementadas han convertido la jornada en una fiesta del vino disfrutada al máximo por miles de asistentes, acogiendo más público que en 2024 y mejorando la experiencia de cada uno de los visitantes”, comenta Rosendo Biosca, presidente de Terres dels Alforins.