El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, ha asegurado que los mercados ya descuentan que BBVA mejorará su oferta por la entidad o, de lo contrario, no conseguirá el respaldo necesario de los accionistas para su opa.
«Lo que transmiten los grandes accionistas institucionales es que, si nada cambia, esto no sale», ha señalado durante la conferencia que ha ofrecido en Alicante, organizada por la Cámara de Comercio, donde ha defendido una vez más que el proyecto en solitario del Sabadell será más rentable y con menos riesgos que si se fusiona con su competidor.
Eso sí, Oliu tambián ha apuntado que la prima negativa en la que se encuentra la operación (el Sabadell vale ahora más de lo que ofrece el BBVA) significa que los mercados descuentan que habrá una mejora de esa oferta, a pesar de las declaraciones en contra de Carlos Torres y todo su equipo.
Oliu se ha esforzado por recordar los argumentos económicos que lleva ya más de un año esgrimiendo para rechazar la opa, entre los que ha insistido en la rentabilidad que ha alcanzado el banco y que le permitirá repartir entre el año pasado y este ejercicio 3.400 millones de euros entre sus accionistas. «Desde 2020 el valor de la acción se ha multiplicado por ocho, como si fuera una tecnológica», ha insistido.
También ha defendido el «alma» de la entidad y su foco en apoyar a las empresas, incluso ha apelado a cuestiones sentimentales al asegurar que los accionistas deberán decidir entre un banco con un proyecto «español» y otro repartido «español, mexicano y turco». Además, ha insistido en que la actual solvencia del sistema financiero español y europeo permite que convivan bancos de distinto tamaño -regional, nacional o internacional- sin ningún problema y aportando cada uno su valor.
En cuanto a la decisión que debe tomar el Gobierno, no ha querido aventurar nada, pero ha señalado que las medidas que tome deberán incorporarse al folleto para tener en cuenta los posibles riesgos de la operación.