El Partido Popular de Castilla-La Mancha ha apoyado este jueves en las Cortes regionales una propuesta del PSOE para modificar las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura, pero apenas dos días antes había votado lo contrario en el Congreso de los Diputados, respaldando junto a Vox y UPN la proposición de ley presentada por la Asamblea de Murcia para blindar el trasvase.
La moción, aprobada con los votos favorables de los socialistas y los diez parlamentarios del PP castellanomanchego, pedía al Gobierno central un nuevo borrador del Real Decreto que regula el trasvase, de acuerdo con la reciente sentencia del Tribunal Supremo y que obliga implantar de inmediato los caudales ecológicos más exigentes en el Tajo. Solo los tres parlamentarios de Vox han votado en contra. El texto reclama también la eliminación de la prórroga sobre los caudales ecológicos del Tajo, para que se apliquen de inmediato y se prioricen las necesidades de la cuenca cedente.
Desde el PSOE, el diputado Francisco José Barato ha celebrado el apoyo del PP en el Parlamento autonómico, pero ha acusado a los ‘populares’ de “decir una cosa en Castilla-La Mancha y hacer la contraria en Madrid”.
“El martes se retrataron votando en el Congreso a favor de los intereses de Murcia. El PP vuelve al memorándum de la vergüenza de Rajoy y Cospedal”, ha afirmado en alusión al pacto que facilitó trasvases con volúmenes mayores durante los gobiernos del PP.
Los ‘populares’, por su parte, han acusado al Gobierno de Emiliano García-Page de usar el agua como arma electoral. Su portavoz regional, Carolina Agudo, ha defendido que el PP “siempre ha priorizado a la cuenca cedente” y ha reivindicado el Pacto Regional por el Agua firmado con el PSOE en 2020. “No vamos a ceder ante el ecologismo trasnochado ni ante los intereses electoralistas del PSOE. Queremos un plan nacional del agua que respete las necesidades de Castilla-La Mancha”, ha señalado.
Vox, en su intervención, ha tildado el debate de “excusa más” del bipartidismo para no abordar una gestión eficiente del agua. El diputado Iván Sánchez ha reclamado un auténtico plan nacional del agua, “alejado de ideologías”, y ha acusado tanto a PP como a PSOE de haber fracasado en esta materia durante décadas.
El Gobierno de Page, en contra del uso «sin control» del agua para el Levante
La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, ha asegurado que el Ejecutivo autonómico “no está en contra del trasvase para consumo humano”, pero sí del uso “sin control ni medida” del agua en el Levante. Ha recordado que el memorándum aprobado por el Gobierno de Mariano Rajoy y con el visto bueno también de María Dolores de Cospedal redujo los recursos de los embalses de cabecera sin tener en cuenta a Castilla-La Mancha: “Dio derecho de pernada al Levante”.
Gómez ha zanjado su intervención advirtiendo que Castilla-La Mancha no respaldará nunca un plan nacional del agua que suponga dilapidar sus recursos hídricos, como ha ocurrido en anteriores pactos estatales.
“Ahí no nos van a encontrar”, ha recalcado, apostando por una planificación hidrológica centrada en las siete cuencas que atraviesan la región y que garantice que “nuestros recursos se respeten y se prioricen”. “En esa defensa, sí nos encontrarán, y seguiremos trabajando”, ha concluido.