A dos semanas para Zegama, la gran prueba del trail en España, Sara Alonso ha compartido con sus seguidores una semana completa de entrenamientos en su canal de YouTube. El vídeo, titulado con la naturalidad que la caracteriza, muestra no solo series, tiradas largas y gimnasio, sino también las dudas, risas y pequeños dramas que acompañan a quien se prepara para una de las carreras más duras del mundo.
«Me han preguntado cuántos kilómetros hago en una semana. Pues aquí está«, dice mirando a cámara. 112 kilómetros y 4.750 metros de desnivel positivo, repartidos entre Donosti, Madrid y los senderos de Aizkorri. Tiradas de 27 y 30 km, días de elíptica, sesiones de fuerza y hasta una piscina desmontable para el descanso. «Hasta ahora solo tenía manguera, pero ya tengo piscina», bromea mientras se tira al agua.
Sara ha vuelto a meter series intensas tras su gira asiática y lo ha hecho a lo grande: «Creo que pocas veces he hecho un entrenamiento de series tan bueno”, confiesa tras completar 4×1.000 y 12×2.000 metros. También retoma el uso de su placa de carbono tras semanas sin ella: «Espero notar ese punch».
La semana la remata con una tirada en Zegama: 27 km con 1.700 positivos junto a Ikran Rassala, a ritmo progresivo desde Sancti Spiritu. «Está más fuerte que el vinagre», dice sobre su compañera de entreno, entre bromas y resoplidos. Al día siguiente, otros 26 km con 1.800 positivos. «No ha sido la semana con más kilómetros, pero sí con más desnivel”, resume con satisfacción.
Nervios, humildad y realismo
Más allá del físico, lo que el vídeo revela es la gestión emocional de una atleta que se muestra tal cual es. “Estoy un poco nerviosa. Todo lo que hago estos días pienso que puede afectar a Zegama”, dice antes de empezar una sesión clave. En otro momento, se sincera: “No creo que haya otro vídeo antes de la carrera porque estoy bastante nerviosa”.
Durante la semana también cuenta que ha decidido operarse de la vista tras la carrera. «Me pongo muy nerviosa con las lentillas. Es algo que puedo solucionar y voy a aprovechar el parón tras Zegama para operarme«. Una frase que define a la perfección su forma de afrontar el deporte: paso a paso, con inteligencia.
Zegama: el objetivo que lo cambia todo
Sara lo ha dejado claro: Zegama-Aizkorri 2025 no es una carrera más. En la entrevista que concedió días atrás, afirmó que su gran objetivo es «pelear por el podio, aunque si no sale, lo volveré a intentar».
Con menos de dos semanas por delante y una comunidad cada vez más fiel siguiéndola tanto en Instagram como en YouTube, la corredora donostiarra llega a la gran cita en su punto dulce. «Desearme suerte», dice al final del vídeo.
«Haya barro o no, va a haber vídeo de Zegama. Salga bien o mal«. Y eso, precisamente, es lo que la hace diferente: su autenticidad, su esfuerzo y su manera de compartir el camino sin filtros. Porque en el mundo del trail, como en la vida, lo que importa no es solo la meta… sino cómo se cuenta el viaje.