El Consell de Mallorca arranca este jueves la campaña de verano contra la oferta turística ilegal, que se prolongará hasta el 15 de noviembre, y que prevé llevar a cabo más de 3.000 inspecciones con el objetivo de «acorralar a quien hace las cosas al margen de la legalidad».
Lo ha explicado este jueves en rueda de prensa el conseller insular de Turismo, José Marcial Rodríguez, que ha explicado que la campaña arranca con la novedad de que ya contempla el contenido del decreto turístico aprobado por el Govern que determina la actuación sobre establecimientos que no han operado en los últimos tres años, la revisión de los niveles de calidad de la oferta reglada y la comprobación de las declaraciones responsables de inicio de actividad.
Respecto a esta última cuestión, el responsable insular de Turismo ha recordado que el decreto del Ejecutivo autonómico contempla, como novedad, que si se detectan irregularidades no se puede volver a presentar una nueva declaración. «De esta forma, además de dar cumplimiento al decreto, se hará lo que marca la ley de 2017, que ya ordenaba este tipo de actuaciones y nunca se hicieron», ha abundado el conseller.
«Los inspectores del departamento de Turismo tienen previsto visitar aproximadamente unos 3.100 establecimientos en total», ha avanzado el conseller insular, que ha recordado que gracias a la reorganización y el refuerzo de los medios humanos del departamento que dirige, ahora todos ubicados en dependencias de La Misericordia, «los resultados seguirán llegando».
En este contexto, a día de hoy el área dedicada a la oferta legal cuenta con 10 inspectores y la enfocada en la oferta ilegal hay 17 inspectores. Así, hay operativos 27 inspectores, con la intención de llegar a 30.
Este plan de acción estará especialmente enfocado a la lucha contra la oferta ilegal, ya que concentra el 75 por ciento de las actuaciones en esta dirección. Otro 20 por ciento irá orientado a dar respuesta a denuncias y reclamaciones ciudadanas, mientras que el resto, además de la oferta ilegal, irán destinadas a comprobar posibles irregularidades en la oferta legal, como la sobreocupación, la circularidad, el turismo de excesos o la comprobación del tres por ciento del producto local.
Sintonía con Airbnb
En relación a la oferta turística ilegal, el conseller insular ha resaltado la buena sintonía con plataformas como Airbnb, con quien se sigue trabajando y «avanzando adecuadamente» para lograr un acuerdo para la retirada de anuncios de oferta ilegal.
Sobre casos como el de la hospedería de Lluc y el agroturimo vinculado al alcalde de Santa Margalida, Joan Monjo, el responsable insular de turismo ha insistido en que trasladar información sobre procedimientos jurídicos pueden poner en peligro las tramitaciones.
José Marcial Rodríguez ha señalado, por ejemplo en relación al agroturismo de Santa Margalida, que está abierto «a riesgo y ventura de lo que el propietario decida».
Satisfactorio año 2024
José Marcial Rodríguez ha aprovechado para hacer balance de la actividad inspectora del año pasado, que ha calificado como satisfactoria, después de que aumentaran hasta en un 216% el número de inspecciones (3.569 frente a 1.128) respecto al año anterior.
Igualmente, se abrieron 504 actas de sanción a viviendas destinadas al alquiler turístico ilegal (+25%) por importes totales que suman más de cuatro millones de euros.