La humanidad ha alcanzado niveles avanzados de sofisticación tecnológica, pero aquí estamos, escribiendo de ‘Nubs!: Arena’, un juego en el que coloridos personajes se reparten galletas por escenarios absurdos. ¿Por qué? Porque el estudio indie Glowfish Interactive, junto a los no menos impredecibles Rangatang, han lanzado oficialmente el juego en Steam y se puede conseguir gratis solo durante las primeras 24 horas
Locura total
El juego nos propone alocadas dinámicas de acción con elementos ‘roguelite’ que ofrece suficiente descontrol como para destrozar familias y amistades (en el buen sentido, o no). Todo es muy amistoso, hasta que alguien lanza una sandía explosiva o caes en una trampa de pinchos. Entonces empieza lo bueno. Aquí podrás participar en peleas en línea en grupos de 4 a 20 jugadores o de forma local, con hasta 4 jugadores en combates todos contra todos.
En cada ronda rápida te encontrarás con arenas llenas de trampas, podrás conseguir habilidades pasivas y mejoras o simplemente extraños efectos. Cuando te noquean, te conviertes en una estrella y más te vale correr por tu vida, porque si alguien te atrapa antes de que reaparezcas, quedarás completamente eliminado. Es bueno saberlo.
Características
Hay personalización y podrás crear tu muñeco, ponerle un gorro loquísimo y lanzarlo directo al caos en partidas en solitario o por equipos, desde 4 hasta 20 jugadores. Cada ronda es corta, pero lo suficientemente tramposa como para alargarse durante horas. Hay progresión roguelite, mejoras aleatorias y armas sacadas del contenedor de un todo a cien. Algunas funcionan, otras hacen ruido, incluso en ciertos casos, el arma es un pez. Ya avisé.
Nubs: Arena – Launch Trailer
La estética es simple, los controles son accesibles y todo se mueve con esa física que convierte cualquier combate en una tragicomedia. Solo hace falta puntería y ganas de molestar. ‘Nubs!: Arena’ ya está disponible en Steam, y si eres ágil puedes conseguirlo gratis. Si no llegas a tiempo, siempre te queda la opción de pasar por caja, pero ya no es lo mismo (como cuando tienes que explicar un chiste).